El Consell de Mallorca aprobará próximamente el primer plan de acogimiento residencial de menores, que definirá «la hoja de ruta a recorrer los próximos cuatro años, de 2024 a 2028». Así lo ha anunciando este jueves el presidente de Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), Guillermo Sánchez, en la rueda de prensa convocada para explicar las medidas aplicadas al servicio de la infancia y la adolescencia.
Preguntado al respecto por los medios de comunicación, el presidente del IMAS ha detallado que actualmente hay entre 750 y 770 menores a los que se aplican medidas de protección, de los que 500 están en red asistencial.
Y sobre el nuevo plan, ha concretado que se basa en cinco ejes. Estos son garantía de un entorno seguro, emancipación y transición a la vida adulta, intervención familiar, la salud mental de los menores y formación en el uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
«Se trata de un plan ambicioso, no vamos con medias tintas. La protección de los menores requiere la mejor atención», ha resaltado Sánchez, poniendo también en valor que la elaboración del plan ha contado con la participación del personal técnico del IMAS, de las entidades que trabajan con la institución y de los propios niños que están en el servicio del centro de menores. El plan se someterá en las próximas semanas al Consejo Rector y, previsiblemente, se aprobará más adelante en el pleno del Consell.
Creación de puestos de trabajo
Al inicio de su intervención, el presidente del IMAS ha destacado también el refuerzo de plantilla y la creación de nuevos puestos de trabajo. «Si queremos mejorar la atención de los menores, es fundamental dar cobertura a nivel de recursos humanos, y para garantizar todos los programas temporales de los que disponía el IMAS, se requería también una estructuración para darles continuidad», ha indicado Sánchez.
En esta línea, ha recordado la aportación extraordinaria de cuatro millones de euros para garantizar estos programas dirigidos a los menores y otros. Además, ha anunciado la creación de nuevas figuras, entre ellas la de coordinador de centros propios, la de jefe de servicio de acogimiento residencial, la de jefe de departamento de servicios sociales de infancia y familia o la de técnico especializado en infancia y adolescencia.
Este último trabajará con los servicios sociales municipales en protocolos de intervención y prevención comunitaria. «Si no intervenimos, no reduciremos casos ni situaciones de riesgo», ha sentenciado el responsable del IMAS. Igualmente, ha mencionado otras medidas como la creación de un programa de niños y adolescentes no acompañados, cuyo equipo estará formado por educadores sociales, trabajadores sociales y mediadores culturales. Por último, Sánchez se ha referido a los centros residenciales propios de la institución, que actualmente no disponen de autorización, algo que, según ha dicho, no se pueden permitir. En este sentido, ha avanzado que quieren «subir un plus» y establecer criterios de calidad en dichos centros «para no solo autorizarlos, sino poderlos acreditar».