Las agencias de viajes se han lanzado 'a la caza' de los jubilados o mayores de 55 años, que buscan alternativas al Imserso. El presidente de las agencias de viaje Aviba, Pedro Fiol, explica que los paquetes vacacionales subvencionados por el Gobierno se han quedado desfasados, ya que no se han adaptado a la evolución que han sufrido sus beneficiarios. En este sentido, apunta que ahora las personas de 55 años en adelante tienen mejores condiciones de salud que antes, están más acostumbrados a viajar y cuentan con más recursos económicos.
De hecho, diversos estudios ponen de manifiesto que su poder adquisitivo es mayor que el de muchos jóvenes. «Ahora se está jubilando la generación del baby boom, que ha disfrutado de salarios más elevados que los que ahora tienen sus hijos. Por tanto, tienen salud, tiempo y dinero para moverse por el mundo», explica el presidente de Aviba.
En este punto, destaca que la tercera edad ya representa entre un 30 % y un 35 % de los clientes de las agencias de viajes, un porcentaje que se ha ido incrementando en los últimos años. Esto ha motivado que el número de touroperadores especializados en este sector haya pasado de tres o cuatro a una docena en sólo unos años. «Esto demuestra que hay demanda», argumenta.
Catálogos alternativos al Imserso
Además, precisa que incluso hay agencias de viajes, como Viajes Tramuntana (con sede en Mallorca), Club de Vacaciones (del grupo Corte Inglés) y la misma Ávoris, que organiza este año los viajes del Imserso, tienen sus propios catálogos alternativos destinados a mayores de 55 años. Uno de ellos, el conocido como low cost, es similar a los productos que ya ofrece el Imserso, pero con la diferencia de que da la opción de elegir las fechas y el destino. Su precio suele ser entre 80 y 100 euros superior a los paquetes subvencionados por el Gobierno. El otro es el premium y son viajes más caros, en los que los clientes demandan también ciudades europeas (Roma, Budapest, Lisboa, etc.), e incluso, hay muchos que se van a Asia. Aquí también se incluyen los cruceros, especialmente los fluviales.
Una de las demandas en las que suelen coincidir los mayores de 55 años es que quieren viajes organizados, es decir, con las comidas y las excursiones organizadas. «Los mayores de 55 años no suelen querer complicarse la vida pensando qué lugares visitar o cómo, ni dónde comer», expone. Además, añade que tampoco les resulta agradable tener que hacer colas para coger viajes, que puede que no se adapten 100 % a sus gustos. Por ejemplo, de los viajes culturales, que suelen ser muy demandados, hay muy pocas plazas.
El presidente de Aviba insiste en la necesidad de repensar los viajes del Imserso y destaca que la propia directora del citado organismo público, Mayte Sancho, lo ha reconocido recientemente. Mientras tanto, el mercado libre ya está aprovechando la oportunidad que representa este nuevo nicho de mercado.