El Consell de Mallorca reasfaltará por las noches gran parte de la vía de cintura de Palma tras más de 20 años sin reforzar el firme. Las obras empezarán en septiembre, después de la temporada alta, y se actuará en un tramo de unos siete kilómetros, entre el Estadi Balear y las rotondas de la carretera de Valldemossa. Así lo explican fuentes del Departament de Territori, Mobilitat i Infraestructures, que ayer informaron de que contarán con un presupuesto de 11,5 millones de euros para mejorar el asfalto.
Con esta medida se espera reducir el ruido provocado por el tráfico, lo que irá acompañado de la instalación de panales acústicos a lo largo de la vía para mitigar este impacto. La institución insular destinará, en total, más de 16 millones de euros, provenientes del remanente de tesorería de 2023, a mejorar la red de carreteras de Mallorca y a impulsar los proyectos de viales cívicos.
Una parte de los remanentes irán a la campaña de 20 millones presupuestada para este año para mejorar el firme de carreteras secundarias de la Isla. También se impulsará la reforma, muy solicitada, de la carretera que enlaza Bunyola-Orient-Alaró con un presupuesto de 5,8 millones. Asimismo, se invertirán unos tres millones de euros en la construcción de rotondas como la de la salida de Campos hacia la Colònia de Sant Jordi o el nuevo asfalto de la carretera Palma-Sineu desde Els Hostalots. En cuanto a los viales cívicos, se destinarán 1,9 millones a la construcción del proyecto de carril peatonal y de bicicletas que unirá Pòrtol (Marratxí) con Santa Maria o a culminar el vial cívico de Alaró.
Nuevos carriles
Otra gran medida prevista por el Consell en la vía de cintura es la de ganar dos carriles adicionales. La vía de cintura tiene tres carriles, pero en en el paso de nivel de la rotonda de Can Blau solamente hay dos y esto provoca retenciones, sobre todo por la mañana. La idea es ganar un carril izquierdo redefiniendo el trazado actual de la vía. Los técnicos también ven factible ganar otro carril a la mediana entre la incorporación a la vía de cintura desde la autopista de Inca y hasta la altura de la cárcel para evitar que los conductores tengan que frenar al incorporarse. En este caso sí que se tendrían que hacer obras de gran calado.