Matthias Kühn ha asegurado, a través de su representación procesal, que está «muy tranquilo y relajado» ante la nueva querella y que confía en que el fiscal y la juez de instrucción harán su trabajo y se demostrará que no existió maquinación para ocultar fondos ni ninguna maniobra extraña con sus empresas. Ha añadido que se defenderá en los tribunales y no en los medios.
El empresario se encontraba esta semana aún en España, después de unas jornadas judiciales intensas: la confirmación por parte del Tribunal Supremo de la indemnización de los 96 millones de euros por Muleta y el registro de la Agencia Tributaria en su domicilio en la causa que estaba bajo secreto hasta hace unos días y que abre un nuevo frente al empresario, que reside en Suiza desde 2013.
La querella de Anticorrupción alcanza a doce sociedades del grupo y a cinco personas físicas, entre ellas la mujer y los dos hijos del empresario. A través de un comunicado a inicios de esta semana, el empresario destacaba que ofreció en 2018 a la Agencia Tributaria los derechos sobre la indemnización de Muleta como compensación para su deuda por impagos de impuestos.