La partida por el traslado de miles de mallorquinistas a Sevilla la ganan los vuelos regulares por goleada a las agencias de viaje que intentaron poner en el mercado vuelos discrecionales. La irrupción de las aerolíneas, que han desplegado un total de 29 vuelos para la final de la Copa del Rey ha provocado una anulación de numerosos de los vuelos charter que intentaban fletar agencias de viajes.
Las líneas regulares se benefician del descuento de residente del 75 por ciento una vez que cuentan con la autorización de Aviación Civil. Así ofrecen a los aficionados precios finales mucho más competitivos que los charter. Según fuentes del sector, mientras las agencias comercializaban los aviones fletados para la ocasión por unos 400 euros con traslados y seguros, hay compañías que los están comercializando por 250 euros pero con el descuento aplicado para el consumidor. Es decir, en realidad llegan a cobrar mil euros por billete pero esa diferencia queda compensada por la aportación del Estado. Las agencias de viaje se encuentran con que no pueden competir al no poder aplicar el descuento y alguna ha llegado a cancelar hasta cuatro de los charters que tenía previstos para llegar a Sevilla. En su precio final se incluían además los traslados desde el aeropuerto al estadio y un seguro.
Los mallorquinistas que opten por las compañías tradicionales no tendrán ese traslado asegurado y algunos de los horarios pueden comprometer la llegada a las diez de la noche al estadio si hay problemas con el transporte público desde el aeropuerto a la Cartuja. El traslado no es sencillo y, o es en taxi o es necesario pasar por la estación de Santa Justa o hacer un largo transbordo en autobús en Nervión.
Las situación ha provocado un gran malestar entre las agencias de viaje que planeaban fletar charters. Después de que se les denegara a ellos aplicar el descuento de residente en esos trayectos, se encuentran con que será esa herramienta la que permita a las aerolíneas multiplicar sus márgenes y obtener facturaciones cercanas a los 190.000 euros por cada uno de los aviones que destinen a esas rutas.
Además, algunos de los operadores que se han sumado a la ruta para la Copa del Rey no vuelan de forma habitual a Sevilla, como son los casos de Iberia, que pone cuatro vuelos o de Ryanair, con tres. Otras, como Vueling, que realizará nueve viajes en para la operación de la final, han multiplicado sus frecuencias para esos días. Para las agencias supone una competencia desleal que Aviación Civil permita a esos vuelos funcionar como si fueran regulares cuando, en realidad, se han organizado para una situación concreta.
El secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano, respondió al Govern esta semana que no era posible ampliar las subvenciones por residente a transporte aéreo discrecional. Señalaba que para ello sería necesario un cambio legal y que, por falta de tiempo para llevarla a cabo era algo inviable. Sin embargo ya deslizaba la opción de que «una o varias de las aerolíneas que habitualmente operan con las Islas incrementasen sus vuelo puntualmente y de forma voluntaria, para atender esa demanda». Ponía como condiciones para subvencionar esos vuelos que todos los billetes estuvieran a disposición del público en general y que fueran las tarifas habituales, si bien el precio se ha incrementado de forma notable. La venta de billetes está en pausa una vez se han vendido las entradas disponibles para los socios y se reactivarán cuando a partir del día 26 se permita acceder a la compra a los no socios.
Se trata de otro obstáculo para las agencias que tendrán que aguardar hasta después de Semana Santa mientras las aerolíneas comercializan a través de sus páginas web, lo que también desincentiva la organización de vuelos discrecionales ante la incertidumbre que genera.
Los vuelos desde Bilbao a Sevilla se están organizando por precios por encima de los 500 euros ida y vuelta, precios aún superiores a los que ofertaban las agencias de viajes para los charters desde Palma aunque, evidentemente, en el caso vizcaíno hay otras opciones de viaje.
Hasta el momento se prevé el desplazamiento de más de 15.000 mallorquinistas a Sevilla para asistir a la final. En total son 21.000 las entradas disponibles para el club en el estadio para el próximo seis de abril.