El caos que desde primera hora de este viernes se ha vivido en los controles de acceso al aeropuerto de Palma se ha debido a una huelga de celo de los trabajadores de Trablisa. Así se lo han confirmado a Ultima hora fuentes aeroportuarias. Muchos pasajeros han perdido su vuelo.
Los tripulantes están informando a los pasajeros a bordo de los aviones de retrasos en las horas de salida, provocados por «problemas en los controles». El número de pasajeros que pasan por el mostrador de facturación y no llegan a tiempo al embarque es cada vez más elevado, según informan las mismas fuentes.
AENA niega que haya alguna huelga formalmente convocada. La conocida como huelga de celo, no es una huelga al uso. Los trabajadores llevan al extremo el cumplimiento de sus obligaciones retrasando el proceso de control del equipaje hasta provocar el colapso.
Trablisa niega la protesta de sus trabajadores. «Ha sido una situación puntual en los controles que está resuelta», mantiene la empresa de seguridad privada. AENA ha confirmado pasadas las 12.00 horas que «la situación ya se ha normalizado».
La explicación de la empresa de seguridad privada contrasta con la de los viajeros atrapados en Son Sant Joan. «Los trabajadores de seguridad del control del aeropuerto iban muy lentos y lo revisaban todo. Cuando se ha producido el desmayo había mucha gente apelotonada. Todo junto es especialmente indignante que pase, especialmente días después de que AENA haya incrementado sustancialmente las tasas aeroportuarias», informa uno de los viajeros.
Otros afectados han explicado que uno de los dos filtros de control de acceso a la zona restringida del aeropuerto ha llegado a estar cerrado completamente. Esta circunstancia, combinada con el ritmo de trabajo del personal de seguridad, ha provocado el colapso del sistema.