Las obras de construcción de las instalaciones para producir y transportar hidrógeno verde concluirán en las próximas semanas, según ha constatado este lunes el conseller de Empresa, Empleo y Energía, Alejandro Sáenz de San Pedro, que ha visitado los trabajos del hidrogenoducto. Está previsto que la planta de Lloseta, pionera en España, introduzca por primera vez hidrógeno verde en una red de distribución y transporte de gas natural de la isla, según ha recordado la Conselleria en una nota de prensa.
Esta infraestructura permitirá que todo el hidrógeno renovable que se produzca en la planta de se inyecte directamente a la posición de Cas Tresorer, punto de partida de las redes de transporte y distribución de gas de Mallorca. Sáenz de San Pedro ha resaltado que se está entrando en la recta final del proyecto, controlando todos los detalles para comprobar que todo esté correcto y empezar a producir y distribuir hidrógeno verde en Baleares, «una fuente de energía que beneficiará a empresas, industrias y también a los ciudadanos».
La mezcla de hidrógeno verde y gas natural es la pieza clave de este proyecto que, además de ser la primera instalación de este tipo que se realiza en España, es por capacidad una de las más grandes de Europa. La generación de esta fuente de energía beneficiará a más de 115.000 hogares y 2.000 consumidores terciarios e industriales, que podrán disfrutar de un combustible sostenible y 100% renovable. Así, el gas canalizado a través de este proyecto fomentará la competitividad de la industria y ayudará a ahorrar a las familias, ya que reducirán la factura energética de los hogares. Durante la visita, el conseller ha podido ver el mezclador y el punto de inyección que podrá llegar a inyectar hasta 575 T/año (19.147 MWh/año).
Con una inversión superior a los tres millones de euros, el hidrogenoducto de 3,2 kilómetros de longitud prevé alcanzar una reducción de emisiones de hasta 3.829 T CO2, lo que ayudará a cumplir con los objetivos de descarbonización, permitirá una economía más limpia y circular y avanzar hacia una sociedad 'cero neto', es decir, un escenario donde la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero se acerca lo más cerca posible a las emisiones nulas.
Se trata de la primera instalación de inyección de hidrógeno renovable autorizada en el sistema gasista español y permitirá inyectar hidrógeno en la red de gas natural que suministra a toda la isla, compuesta a su vez por más de 160 kilómetros de gasoductos y 1.150 kilómetros de redes de distribución. El director general de Economía Circular, Transición Energética y cambio Climático, Diego Viu, y la directora general de Industria y Polígonos Industriales, Ingrid de la Fuente, también han visitado las actuaciones.
En la visita también han participado el director de Ofertas, Ingeniería y Ejecución de Redexis (empresa que ejecuta la instalación del sistema de inyección de hidrógeno verde de Lloseta), Diego Sánchez Muslera; el director general de Redexis Renovables, Miguel Mayrata, y el director de la compañía en Baleares, Hernando Rayo.
Esta infraestructura se enmarca en el proyecto de subvención europea Green Hysland, conformado por más de 30 organizaciones, empresas y centros tecnológicos, entre los que se incluye Enagás, Acciona Energía y Cemex.
La Unión Europea, a través de la Clean Hydrogen Partnership ha comprometido diez millones de euros para apoyar el despliegue de las infraestructuras necesarias para convertir el ecosistema de hidrógeno renovable de Mallorca en realidad en el periodo 2021-2025, y reúne todos los elementos centrales de la cadena de valor del hidrógeno a través de la producción, la infraestructura de transporte y distribución y el uso final del hidrógeno renovable.