Con la ampliación de una temporada turística que este año arranca tres meses antes del verano y una previsión récord en el número de asientos y de vuelos programados, 2024 va camino de ser el año de la consolidación definitiva de la recuperación turística, con todas sus luces y sombras.
Desde el GOB miran los datos con preocupación. «No es motivo de celebración, no se debería de leer como una buena noticia ni por el impacto de la aviación sobre el territorio, ni por el impacto de un incremento de pasajeros en la sociedad de aquí», sostienen.
Creen además que el anuncio les «da la razón» y recuerdan su oposición a una ampliación del aeropuerto de Palma que ahora, dicen, se confirma: "es una ampliación de la capacidad del aeropuerto por una cuestión pura y exclusivamente de negocio".
En este sentido, critican "el objetivo político de recuperar a toda costa los datos prepandémicos, independientemente de sus consecuencias", y consideran "una total irresponsabilidad seguir invirtiendo en la superación de metas y en seguir batiendo récords, sin hacer ningún tipo de análisis sobre la capacidad de carga del territorio".
Sin embargo, agencias y hoteleros atribuyen el récord de vuelos a un cambio de tendencia en el modelo de turismo que llega a Mallorca y coinciden en señalar que el incremento en la previsión de asientos no tiene por qué significar, necesariamente, más gente.
El adelanto de la estación turística, un mayor protagonismo de las temporadas baja y media o la apuesta por el turismo urbano serían algunos de los factores que, según el sector, explicarían las cifras récord.
Y es que, tanto la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) como la Agrupación Empresarial de Agencias de Viaje de Baleares (AVIBA) recuerdan que no se ha incrementado la capacidad hotelera y que, de hecho, en los últimos años, se ha producido una reducción en el número medio de pernoctaciones.
«Al descender la estancia media, hay más entradas y más salidas para el mismo número de pernoctaciones», explica la FEHM. Esto supone, según AVIBA, "una mayor rotación de clientes pero no significa necesariamente más gente, sino otra forma de viajar».
«Se ha producido un cambio de tendencia en el turismo», sostienen desde AVIBA. «La buena climatología se traduce en una temporada anormalmente larga en la que cada vez tienen más protagonismo las temporadas media y baja», explican. «Además, se ha hecho una apuesta muy fuerte por el turismo urbano que ha convertido a Palma en un destino de todo el año, al nivel de Madrid o de Málaga», añaden
«La actividad turística ya crece a lo largo de todo el año. Es el tercer año consecutivo con apertura temprana y con el doble de planta abierta (20%) durante los meses de diciembre y enero que antes de la pandemia», explican en la misma línea desde la FEHM.