La Conselleria de la Mar i Cicle de l'Aigua del Govern ha acogido este jueves una reunión esperada entre los representantes de las principales asociaciones de navegantes de Mallorca (ADN Mediterráneo y Asociación de Navegantes del Norte de Mallorca) y la Dirección General de Puertos y Transporte Marítimo, de la misma manera que con la Dirección General de Costas y Litoral. Durante la misma, mantenida en un ambiente de cordialidad, se ha entregado un documento que recoge los principales objetivos y reivindicaciones de la recién creada asociación, que surgió a raíz de una protesta durante el verano de 2023. Esta entidad nació como respuesta ante la arbitrariedad y asfixia a la que el anterior Govern había sometido a los navegantes y a la náutica recreativa, concretamente, en la zona norte de Mallorca.
También se ha hecho hincapié en la necesidad de reformular la normativa referente a los campos de boyas, ya que se entiende que las franjas horarias comercializadas, los precios por fondeo nocturno y diurno, de la misma manera que la seguridad de estas boyas, han de ser revisadas para fijar tarifas de uso en las que se permita una facilidad de pago, posibilidad de estancias cortas y que a su vez sean de coste simbólico o sean subvencionadas para las embarcaciones locales de navegantes residentes.
En otro orden, se ha hecho patente la necesidad de que las boyas garanticen un fondeo seguro en todas las condiciones meteorológicas, y no solo hasta vientos de hasta 10 nudos de intensidad, como establece la ley. El colectivo de navegantes insistió en que no se criminalicen a la náutica de recreo ni a los navegantes, siempre que las conductas observadas sean cívicas. En el caso de existir una amenaza real para las praderas de posidonia, como se ha demostrado, ha sido por otros motivos y no exclusivmente por el fondeo de embarcaciones. Por ello, se solicita que si se ha de instalar un campo de boyas, no sean sobre arena, sino sobre praderas de posidonia y con anclajes ecológicos que eviten dañar la planta en sí y las praderas.
Desde la Conselleria se ha trasladado la voluntad que alcanzar acuerdos en temas de interés colectivo, caso de la posibilidad de generalizar el fondeo libre sobre arena, que en la práctica no se permite si existe un campo de boyas instalado. El Govern también ha puesto sobre la mesa la idea de modificar aspectos normativos relacionados con la náutica de recreo, trabajándose en un paquete legislativo para mejorar la normativa vigente al observarse que los proyectos de los campos de boyas actuales no cumplen con el Decreto sobre la conservación de la Posidonia oceánica en Baleares, al no tener prevista la delimitación de zonas de fondeo sobre arena, como es establece. Al igual que los proyectos de campos de boyas, como el de Formentor, previos a dicho Decreto y que no cumplen con la normativa vigente.
La reunión ha finalizado emplazándose a seguir dialogando para potenciar y defender la náutica recreativa como actividad singular en nuestras islas, a la vez que los representantes del Govern han solicitado tiempo para adoptar medidas, señalando que esperan que puedan entrar en vigor y observarse los primeros resultados positivos de cara a la temporada turística de 2025.