Una borrasca dejará lluvias en Mallorca, según ha informado la delegada y portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), María José Guerrero. En concreto, llegará el viernes, 16 de febrero, y sus efectos se mantendrán hasta el sábado por la mañana. Cabe precisar que no serán precipitaciones muy abundantes, ya que el pronóstico del tiempo indica intervalos nubosos con alguna lluvia, en general débil, que puede ir acompañada de barro. Las temperaturas se mantendrán con pocos cambios o en ligero descenso las diurnas. El viento será entre flojo y moderado de dirección variable tendiendo por la tarde a norte y nordeste moderado con intervalos de fuerte.
El sábado, 17 de febrero, se esperan intervalos nubosos sin descartar alguna precipitación débil de madrugada tendiendo durante la mañana a predominio de cielos poco nubosos. Las temperaturas serán muy parecidas a las de la jornada anterior. El viento soplará moderado del norte y nordeste, disminuyendo a flojo de dirección variable.
Tiempo primaveral en febrero
Mientras se produce la llegada de la citada borrasca, la Isla seguirá con un tiempo primaveral en pleno invierno. Así, la predicción meteorológica para este jueves anuncia cielos nubosos con predominio de nubes medias y altas; además, habrá brumas con algún banco de niebla matinal en el este de Mallorca. Las temperaturas nocturnas irán en ascenso y las diurnas experimentarán pocos cambios. El miércoles se llegó a los 24º en Artà, el Port de Pollença y Muro; a los 23º en Pollença, la Colònia de Sant Pere y sa Pobla; y a los 22º en Petra, Manacor, Sineu y Llucmajor. Se trata de valores bastante más elevados de lo habitual a mediados de febrero, que son unos 14,5º de máxima.