La huelga del personal de seguridad de los aeropuertos alemanes ha provocado la suspensión de ocho vuelos en el aeropuerto de Palma. El goteo de anulaciones se sucede desde primera hora de la mañana de este jueves 1 de febrero.
AENA ha informado este mediodía de que ya se han cancelado seis llegadas y dos salidas desde Sont Sant Joan. La suspensión de vuelos entre Alemania y Palma afecta a los aeropuertos de Fráncfort (con una llegada y una salida canceladas), Hamburgo (con dos llegadas canceladas), Berlín (con una llegada cancelada), Leipzig (con una llegada y una salida cancelada) y Hanover (con una llegada cancelada)
En total se han cancelado más de 1.100 vuelos con salidas o llegadas en los aeropuertos germanos. Los paros están convocados en Hamburgo, Bremen, Hannover, Berlín, Colonia, Düsseldorf, Leipzig, Dresde, Erfurt, Fráncfort y Stuttgart. Los de Berlín Hannover y Hamburgo han conmunicado que no despegará ningún avión y que también los aterrizajes pueden verse afectados.
Hay cerca de 200.000 pasajeros afectados en los once aeropuertos alemanes por la huelga de advertencia de un día del personal de seguridad, convocada por el sindicato del sector servicios ver.di. Los trabajadores reclaman mejoras salariales.
La información va llegando con cuentagotas El aeropuerto de Fráncfort, que inicialmente tenía previsto para este jueves un tráfico de unos 135.000 pasajeros, había cancelado ya unos 300 vuelos y a lo largo de este jueves se esperan más anulaciones.
Los empleados que están en huelga trabajan habitualmente en el control de pasajeros, personal, equipaje, mercancías, carga y en áreas de servicio. El sindicato, que negocia con la Confederación de Empresas de Seguridad Aérea (BDLS) para unos 25.000 empleados del sector en toda Alemania, argumenta que no se ha alcanzado ningún acuerdo en las tres rondas de negociación colectiva para aumentar los salarios en los aeropuertos comerciales.
Ver.di exige 2,80 euros más de sueldo por hora, mayores complementos funcionales y primas por horas extraordinarias desde la primera hora extra durante un periodo de vigencia del convenio colectivo de doce meses. Busca así una compensación para los empleados por la pérdida de poder adquisitivo derivada de la inflación. El jefe negociador de Ver.di, Wolfgang Pieper, dice que la patronal se ha mostrado dispuesta a presentar una posible oferta, aunque sujeta a la condición de que el sindicato acepte un procedimiento de arbitraje. El sindicato rechaza condiciones previas.
La supuesta oferta de la patronal contemplaría aumentos salariales del 4 % en 2024, lo que corresponde a unos 0,55 euros más por hora en el grupo salarial más bajo y a unos 0,82 euros en el más alto. En 2025 se prevé otro aumento del 3 %, equivalente a unos 0,43 y 0,64 euros más por hora, respectivamente.
Para Pieper, «la oferta es totalmente insuficiente, ya que no tiene en cuenta en absoluto la elevada inflación de los dos últimos años», ni el aumento de pluses exigido por el sindicato. «Nos mantenemos firmes en nuestra exigencia de acordar puntos clave vinculantes con los sindicatos antes de finales de febrero de 2024 para cualquier arbitraje que pueda ser necesario», ha dicho Frank Haindl, jefe de la comisión de negociación colectiva de la BDLS, según un comunicado del pasado viernes. Las negociaciones continuarán el próximo 6 y 7 de febrero en Berlín.