La ruta argelina a Baleares es una de las más mortíferas de todo el Mediterráneo Occidental y distintas entidades y ONG la descrimen como una auténtica morgue. En los últimos cinco años, unas 2.000 personas han desaparecido en el mar tratando de llegar en patera a las Islas, Almería, Murcia y Alicante desde Argelia.
Hombres, mujeres, jóvenes y niños han muerto en el mar sin dejar rastro, tal y como informó Efe. El último informe ya publicado de Caminando Fronteras 2023, al que ha tenido acceso este periódico, contabiliza 434 víctimas y otras 30 en la ruta del Estrecho hasta España.
Por otra parte, el Centro Internacional para la Identificación de Migrantes Desparecidos (Cipimd), calculó el último año 452 desapariciones en el tránsito de pateras de Argelia al levante español, y la Organización de Naciones Unidas para las Migraciones (OIM) registró en todo el Mediterráneo Occidental 333 víctimas mortales.
Cruz Roja también desarrolla un proyecto para esclarecer la suerte de las personas desaparecidas en las rutas migratorias hacia España que desde 2021 tiene en Palma su base para la ‘ruta argelina', y la Guardia Civil de las Islas trabaja codo con codo con el Instituto de Medicina Legal y las ONG ligadas a las familias argelinas en la identificación de inmigrantes fallecidos.
Las cifras son variables porque se establecen a partir de testimonios sobre barcas que zarparon y no arribaron a destino o de relatos de inmigrantes llegados tras perder a compañeros de travesía. Tanto Caminando Fronteras como Cipimd reclaman más medios y protocolos efectivos de salvamento, y colaboran con las familias de los desaparecidos para ayudarles a cerrar su duelo en las escasas ocasiones en que aparecen los cuerpos de los náufragos. El hecho de no localizar los cuerpos por la falta de medios puede causar un dolor y sufrimiento en sus familiares irreparable.