El GOB se ha mostrado este martes en contra de la macroplanta de compostaje de Llucmajor y ha apostado por instalaciones de fracción orgánica descentralizada. En una nota de prensa, el GOB ha informado que estas semanas ha recibido la consulta y petición de un informe en relación al proyecto y al Estudio de Impacto Ambiental de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) de la planta de compostaje, promovida por Tirme S.A. en el término municipal de Llucmajor.
El GOB ya registró, en noviembre de 2022, alegaciones al anuncio de aprobación inicial de la Planta de Compostaje para la fracción orgánica de los residuos municipal (FORM) recogida selectivamente, Planta de Llucmajor, y proyectos complementarios de la planta fotovoltaica y de la línea de media tensión, ante el Departamento de Sostenibilidad y Medio Ambiente del Consell que fueron rechazadas por extemporáneas. Lo cual, recurrió pero no obtuvo respuesta.
Desde el GOB han insistido en que las opciones de instalaciones hiperdescentralizadas, implementado soluciones mixtas de compostaje tradicional, doméstico, comunitario y agrocompostaje, fuera del servicio público vinculado a Tirme serían "mucho más eficientes" en términos económicos, repercutirían en la economía y el desarrollo local y evitaría el transporte implícito a la gestión centralizada, que en estos caso no solo es de residuos y compost, sino también de ingentes cantidades de agua necesaria para el funcionamiento de las plantas y que ahora mismo no está garantizado en el proyecto. Por todo esto, la entidad ecologista ha hecho llegar las consideraciones a la Comisión Balear de Medio Ambiente para que sean tenidas en cuenta en el trámite de evaluación ambiental.
En concreto, desde el GOB, y ya en las alegaciones presentadas al Plan Director Sectorial de Residuos no peligrosos se alegó como imprescindible, desde el punto de vista de la optimización y sostenibilidad de la gestión de la FORM, que esta fuera gestionada fuera del servicio público insularizado de gestión de residuos.
A esta primera alegación general al modelo escogido, condicionado por las instalaciones ya existentes vinculadas a la gestión de residuos a través de los servicios públicos de residuos sólidos urbanos (RSU), de Tirme, y construcción, de MAC Insular, que determinan y condicionan el emplazamiento, el modelo de gestión y la inversión, el GOB ha añadido otra serie de cuestiones.