Los accidentes con patinetes eléctricos en Baleares han aumentado un 74 por ciento en 2022, con un total de 696 accidentes, en relación con el año anterior, y un tercio de estos están asociados a traumatismos cranoencefálicos (TCE). Según datos del SAMU 016, en 2021 se contabilizaron en las Islas un total de 400 accidentes con estos vehículos, y este año, hasta el 31 de octubre, se han registrado 600 accidentes. Del total de accidentes con patinetes eléctricos, que pueden ser caídas que provocan daños a la persona que lo conduce o atropellos a un externo, aproximadamente un tercio están asociados a traumatismos craneoencefálicos (TCE). En concreto, en 2022 fueron unos 230 accidentes y en lo que va de año se han registrado 200.
El director médico del SAMU 061, Txema Álvarez, explica que aunque el perfil habitual del usuario de patinetes eléctricos tiende a ser una persona joven, "llama la atención" que en los accidentes están involucradas generalmente personas de entre 40 y 60 años de edad. De estos, un 60 por ciento son hombres y un 40 por ciento, mujeres. En esta línea, el director médico señala que una cuarta parte de los pacientes que llegan al hospital después de sufrir un accidente con un patinete eléctrico ha consumido sustancias tóxicas, principalmente alcohol. Esta cuestión responde al uso de estos vehículos para volver de zonas de ocio. Asimismo, del total de accidentes que se producen con patinetes, un 67 por ciento está provocado por caídas con el mismo y un 20 por ciento, por atropellos.
El SAMU ha identificado los puntos en los que más suceden este tipo de accidentes, así como las horas del día. Así, Palma, Alcúdia, Ibiza y Sant Josep de sa Talaia son los municipios de Baleares con más prevalencia. Estos accidentes se suelen producir en avenidas y cerca de plazas y estaciones, y la franja horaria con más siniestros es entre las 09.00 y las 10.00 horas y las 19.00 y 23.00 horas. Álvarez destaca que a partir de 2021 es cuando se empieza a notar un aumento en los accidentes con estos vehículos. "Durante la pandemia se notificaron casos pero a partir de 2021 hubo un aumento importante", indica. Por otro lado, desde el SAMU detallan que cada año hay una decena de casos graves de accidentes con patinetes que generan alguna discapacidad. Asimismo, en 2021 fallecieron tres personas por este motivo y el año pasado, una.
Las características del patinete eléctrico implican que la zona de la cabeza sea vulnerable cuando se sufre un accidente, más aún si no se lleva casco. Actualmente, la normativa de Palma obliga por ejemplo a llevar un elemento reflectante homologado, pero no a llevar casco. En esta línea, el director médico explica que es frecuente sufrir traumatismos craneoncefálicos tras estos accidentes. Sin embargo, las lesiones más frecuentes se suelen dar en las extremidades superiores, como las muñecas o los brazos. En relación con los TCE, Álvarez señala que la experiencia que tienen desde el SAMU refleja que las personas que sufren accidentes con patinetes no llevan casco. "Quizás ha salido despedido o no lo encontramos, pero muchas veces no existe casco", indica. Así pues, asegura que si se usara esta protección se reduciría "muchísimo" la posibilidad de sufrir un traumatismo craneoencefálico. "Los más leves no ocurrirían y en los casos más graves se reduciría la gravedad". Desde el SAMU insisten en la prevención de estos accidentes, que pasa por ir bien equipado con reflectantes y luminosisad adecuada y, también, por llevar casco.
La Asociación para Revitalización de los Centros Antiguos (Arca) presentó a principios de año la campaña 'Patinetes y Bicis a Raya' para pedir que estos vehículos no circularan por las aceras y otros espacios para peatones en Palma. La campaña defiende que los patinetes eléctricos y las bicis "invaden las aceras con incivismo y una ausencia de control municipal". En este sentido, el portavoz de Patinetes y Bicis a Raya y miembro de la directiva de Arca, Jaume Pla, insiste en el "incivismo" de los usuarios de patinetes que "provocan lesiones con demasiada frecuencia". Asimismo, Pla manifiesta que desde la plataforma están "preocupados por el uso que se hace" y por "la falta de prueba de aptitud y conocimiento para ofrecerles la posibilidad a los usuarios de conducir patinete". "Sin ningún esfuerzo ni conocimiento te subes al patinete, aprietas un botón y te pones a 25 kilómetros por hora" lamenta.
Por ello, Patinetes y Bicis a Raya exige vías exclusivas para los patinetes y para los peatones. "Lo que queremos es tener nuestras aceras solo para peatones, nada más, ni patinetes, ni bicicletas, ni coches, ni motos", añade Pla. Por otro lado, remarcan la necesidad de que los patinetes llevaran algún tipo de matrícula para que puedan ser identificados y "disminuir la impunidad con la que cometen determinadas infracciones". En concreto, Pla señala que el Paseo Mallorca o la calle Blanquerna de Palma son dos espacios en los que se comparte la vía y "ponen en riesgo a los peatones". En esta línea, critica que "hacer compartir espacios legalmente lo que hace es derivar la responsabilidad a los peatones".