El ministro de Industria, Comercio y Turismo, Héctor Gómez, visitó este lunes el expositor de Baleares en la World Travel Market y tuvo ocasión de departir con los dirigentes de las Islas sobre el estado actual del sector turístico, preocupaciones, necesidades y retos a corto y medio alcance.
Se decía que el encarecimiento de España y de Balears perjudicaría al mercado británico. ¿Ha sido así o forma parte del proceso de cambio del turista low cost por otro de mayor calidad y poder adquisitivo?
El objetivo de España como destino siempre ha estado orientado a mercados de calidad. En el caso británico advertimos que es importante analizarlo desde un punto de vista global, no solo fijándonos en el número de turistas, sino sobre todo en el impacto social y económico. Es cierto que estamos viendo un cambio de paradigma después de la pandemia: el turista gasta y experimenta más. Y también pone el viajar en un lugar preponderante en su escala de prioridades. El británico está teniendo un comportamiento muy bueno en gasto y en 2024 parece que va a mejorar. ¿Debemos aspirar a un destino de más calidad? Sin lugar a dudas.
Los tabloides de Reino Unido denunciaron cierta ‘persecución' al turista británico en Balears por cuestiones como las normativas contra el turismo de excesos. ¿Cree que la sociedad británica lo percibe así?
Creo que el turista británico es muy bien acogido en el conjunto del país y en Balears también. El Gobierno de España y los distintos gobiernos autonómicos tienen la obligación de fomentar el comportamiento adecuado en destino: ocio y diversión sí, pero dentro de un orden. Creo que el británico va a seguir mostrando un buen comportamiento como mercado emisor y vamos a seguir trabajando en las decisiones necesarias para evitar tensiones.
¿La industria turística española se ha fortalecido después de la pandemia?
Se ha demostrado que el tejido empresarial turístico es extraordinario. La madurez y capacidad de liderazgo de la iniciativa privada deben ser puestas en valor, porque nos hemos recuperado muy pronto registrando las llegadas de 2019 e incluso aumentando el gasto. Hay muchos destinos en contacto con nosotros que nos tienen como referencia para aprender y mejorar sus fortalezas. El turismo está tirando de la economía española y lo vemos con la EPAhoy: tres millones de personas trabajando directamente en el sector.
¿Ve cercanas las nuevas conexiones directas con mercados lejanos emergentes como los de Asia o América?
En el caso de EEUU, desde Turespaña acompañamos todas las acciones para potenciar la conectividad porque es un mercado extraordinario, muy sólido, que hay que aprovechar. En el caso asiático trabajamos con las aerolíneas porque entendemos que es un mercado especialmente atractivo, donde tenemos que posicionarnos como destino porque ofrece muchas posibilidades, por su capacidad de gasto y por su capacidad estratégica, también los archipiélagos.
¿Qué inquietudes le han transmitido desde el estand balear?
Hemos hablado de su preocupación con ciertas situaciones de tensión como el alquiler de corta duración. El reglamento de regulación europeo va a ayudar mucho, en ese sentido. También hablamos de la importancia de poner en marcha el Parador de Ibiza lo antes posible y de las diferentes líneas de actuación y de posicionamiento de Balears, que han estado apoyadas con la patronal. Se puede decir que la colaboración con la comunidad es muy buena y que tiene unas líneas de actuación que a Turespaña le interesa mucho respaldar.