Sorpresa entre los restauradores por el aumento de reservas anticipadas para las cenas de empresa navideñas

A falta de un mes y medio para que llegue el mes de diciembre, los restaurantes de Mallorca empiezan a llenarse con las reservas para celebrar las famosas comidas y cenas de empresas. Los restauradores están sorprendidos, ya que nunca se habían realizado con tanta antelación. «Esto no había pasado nunca, es algo inédito», asegura el presidente de Mallorca CAEB Restauración, Alfonso Robledo.

Preguntado por el motivo por el que se están realizado las reservas con tanto tiempo, Robledo responde que lo desconocen y reitera su sorpresa por esta circunstancia. Además, puntualiza que en los últimos años algunos de estos eventos gastronómicos han comenzado a celebrarse a finales del mes de noviembre. En relación al tamaño de los grupos, señala que son muy diversos, en función de cada empresa en cuestión.

Respecto a los precios de los menús, el presidente de Mallorca CAEB Restauración informa que oscila entre los 25 y los 50 euros. Además, precisa que los que no los hayan actualizado en los últimos meses, puede que se vean obligados a hacerlo con la finalidad de no incurrir en pérdidas y dejar de ser rentables puesto que el coste de los alimentos está por las nubes; también se han encarecido el precio de la electricidad y de los alquileres, entre otros.

Cena de Nochebuena

Aunque aún no se han generalizado las reservas para los días de Navidad, Robledo confía en que este año vuelva a repetirse la tendencia de cenar en un restaurante en Nochebuena. Hace unos años los establecimientos de restauración estaban cerrados la noche del 24 de diciembre, ya que la tradición marcaba que se cenaba en casa. Sin embargo, en 2022 muchos mallorquines optaron por salir fuera y muchos restauradores decidieron dar respuesta a esta demanda. Esta tendencia comenzó en 2019, pero se vio interrumpida por la pandemia de la COVID-19.

Robledo argumenta que los precios de los alimentos y las bebidas están disparados, motivo por el que muchos ciudadanos optan por reunirse en un restaurante la noche del 24 de diciembre. «Es más económico cenar fuera que en casa. Nosotros compramos los productos un 20 % más baratos», destaca. Además, añade que al hacerlo en casa se suelen comprar más cantidades por el temor a que falte algo. Otro de los inconvenientes es la suciedad que se genera en los hogares y el trabajo que representa para los anfitriones. Sin embargo, en un restaurante se evitan todos estos inconvenientes. También ha manifestado que las malas relaciones de algunas familias, así como los divorcios y separaciones, dan más pie a cenar fuera que a hacerlo en un hogar.