El Centro Penitenciario de Mallorca ha entregado sus condecoraciones con motivo de la conmemoración de la fiesta de Nuestra Señora de la Merced, en un acto que se celebró este martes en el Salón de Actos de la institución. Estas distinciones tienen como objetivo reconocer y destacar las actividades relevantes realizadas por el personal al servicio de la administración penitenciaria.
Por primer año después de la COVID-19, la celebración se desarrolló sin restricciones. De esta forma, se hizo entrega de la Medalla al Mérito Penitenciario de plata a Maria Auxiliadora Domenge Blanco, trabajadora social del centro desde hace 34 y a la que, con este galardón, se reconoce su labor en una tarea tan importante como las relaciones entre las personas internas y sus familiares y allegados.
Además, se reconoció con las Medallas al Mérito Penitenciario de bronce a Raquel Jiménez Cortés, Subdirectora de Tratamiento durante 12 años, y a Aurora García Vera, comadrona jubilada con más de 40 años de dedicación a la atención a internas embarazadas en el Centro Penitenciario y en el Centro de Inserción Social (CIS) de Palma.
Asimismo, en el transcurso del acto se hizo entrega de menciones honoríficas a tres jefes de Servicios y a tres coordinadores de servicio interior, así como al personal funcionario que ha cumplido 25 años en la institución penitenciaria.
La conmemoración de la festividad de la Merced contó con las intervenciones del director del Centro Penitenciario de Mallorca, Francisco Jos Baldonedo, de la directora del CIS-Unidad de Madres de Mallorca, Inmaculada Torres, y de la delegada del Gobierno de Baleares, Aina Calvo, quien destacó «la importante labor social que se lleva a cabo en este centro y que contribuye a garantizar la convivencia entre personas en unas circunstancias complejas, como es la privación de libertad, y facilita su reinserción, que es uno de los objetivos de la institución penitenciaria».
Por su parte, Francisco José Baldonedo, subrayó la «tarea extraordinariamente importante para la seguridad de todos» que desempeña la institución penitenciaria, no solo como responsable de la custodia de las personas que han de cumplir una privación de libertad por mandato judicial, sino también por su implicación en su proceso de reinserción. Baldonedo recalcó que se trata de «ciudadanos que siguen formando parte de la sociedad a la que regresarán, después de pagar sus deudas con la justicia».
Al acto, en el que también intervino la directora del Centro de Inserción Social–Unidad de Madres de Mallorca, Inmaculada Torres, asistieron representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, del Ejército y de la judicatura y autoridades locales.