Las empresas de VTC que operan en Mallorca han solicitado a AENA que convoque un nuevo concurso público para adjudicar 18 plazas de aparcamiento en la zona de llegadas del aeropuerto de Son Sant Joan, tras haberse resuelto otro de 12 sin la «transparencia adecuada por la falta de información adecuada», según indican empresas afectadas de este sector. La multinacional norteamericana Uber y la empresa mallorquina Vaniti Welcome fueron las ganadoras del concurso que adjudicaba 12 plazas, que se han repartido a la mitad cada una de ellas.
El contrato licitado por AENA incluía un total de 12 plazas en el párking asignado para VTC, a la izquierda de la salida principal de la terminal de llegadas. Adicionalmente, se establecía que habrá señalética de la compañía en las instalaciones del aeropuerto, para de este modo facilitar el encuentro de los viajes con los conductores. El contrato tanto para Uber como para Vaniti dura un año y es prorrogable.
Como este concurso público no tuvo mucha información o pasó desapercibido para el resto de empresas competidoras, las mismas han pedido al ente aeroportuario AENA que convoque otro concurso, en esta ocasión para distribuir 18 plazas más. AENA, de este modo, quiere evitar la presentación de recursos contra las últimas adjudicaciones por defecto de forma.
Según AENA, un total de 28.573.364 pasajeros transitaron por el edificio terminal de Son Sant Joan durante el pasado año, lo que representa una recuperación del 96 % en comparación con el movimiento de pasajeros que se registró en el último año de prepandemia, 2019, que fue récord a nivel estadístico.
Uber
La llegada de la multinacional Uber a Mallorca, que se produjo a principios del pasado mes de junio, ha supuesto una revolución para el sector de las VTC en la Isla, que hasta la fecha operaban sin competencia foránea. AENA ha tomado la decisión de convocar el nuevo concurso y ampliarlo en cuanto al número de plazas de parking.
La recogida de pasajeros en puntos específicos en la zona de la terminal de llegadas del aeropuerto palmesano ha sido en los dos últimos años fuente de conflictos entre VTC, minibuses y taxistas, de ahí la intención de AENA de poner orden, regularizar la recogida de pasajeros y evitar, con ello, problemas.