La Audiencia Nacional rechaza entregar a Estados Unidos al empresario británico afincado en Mallorca al que el FBI reclamaba por colaborar con el oligarca ruso Viktor Vekselberg para ocultar el yate Tango. El auto de la Sala de lo Penal descarta que sea posible la extradición dado que, según le legislación española, Richard Masters no habría cometido delito alguno y, por tanto, no se cumplen los requisitos necesarios para su entrega.
Un fiscal del distrito de Columbia había solicitado la detención y extradición de Masters el pasado mes de enero y entonces fue detenido por la Guardia Civil. En total, las autoridades estadounidenses planteaban una batería de quince acusaciones contra Masters. La principal de todas ellas tenía que ver con una serie de operaciones comerciales con las empresas pantalla que empleaba Vekselberg para ocultar al FBI su propiedad sobre el yate de lujo. La compañía de Masters, con sede en Santa María, habría permitido con esas transacciones el mantenimiento de la embarcación. Para los jueces y la Fiscalía española es no es ningún delito.
Vekselberg está dentro del listado de sanciones del Departamento de Estado de EE.UU. desde la invasión de Crimea en 2014 por su colaboración con el régimen de Putin. Sin embargo, la Unión Europea no le incluyó en ese momento en ningún paquete de sanciones. Sin ese requisito, la actividad llevada a cabo por el detenido es plenamente legal, según el auto de la Audiencia Nacional.
También descartan los magistrados que emitir una serie de facturas a nombre del yate Fanta en lugar del Tango constituya un delito de falsedad dado que se trata de meros documentos entre particulares que no alteran ningún elemento esencial. El último bloque de cargos, por blanqueo de capitales, también es desestimado por la Audiencia Nacional. En este caso porque Estados Unidos no acredita ni sostiene en su orden de detención que los fondos empleados para mantener el yate provengan de actividad delictiva alguna. De esta forma se rechaza la entrega.
El empresario había sido detenido en el mes de enero en el Aeropuerto de Barajas. Tras comparecer en la Audiencia Nacional quedó en libertad a la espera de que se resolviera el proceso de extradición. Se trata de un empresario muy conocido en Santa María y dedicado al sector naútico de lujo. Entre las actividades supuestamente ilícitas se encuentra la contratación de servicios para el Tango en Estados Unidos como software para videoconferencias o el encargo a una empresa especializada de albornoces de lujo con el nombre del Tango bordado.
El apunte
El Tango sigue atracado en el Club de Mar a costa de los norteamericanos
Mientras tanto, el Tango, el yate cuya propiedad es del oligarca ruso Viktor Vekselberg, sigue en el Club de Mar de Palma. La embarcación fue incautada en abril de 2022 en aplicación de las sanciones impuestas por la invasión de Ucrania. El gobierno estadounidense de ocupa del mantenimiento de la embarcación que está en perfecto estado.