El Govern ha aclarado este lunes que la aplicación del régimen fiscal de Baleares no se verá afectado de ningún modo por el adelanto electoral, que sí obliga a suspender la tramitación de más de 60 leyes, 25 de ellas procedentes de decretos-ley que ya están en vigor, otras ocho aprobadas por el Gobierno y alrededor de una treintena impulsadas por los grupos parlamentarios.
Fuentes del Ejecutivo autonómico han explicado que el régimen fiscal está vigor a través de la Ley de Presupuestos de 2023, aprobada a finales del año pasado, por lo que la disolución de las Cortes y la paralización de la actividad parlamentaria no afecta a las novedades fiscales introducidas este año.
Cabe recordar que una vez se publique el decreto de disolución, sólo quedará en funcionamiento la Diputación Permanente del Congreso, pero no así el Pleno de la Cámara, que ya no podrá reunirse hasta la sesión constitutiva de la próxima legislatura, prevista para mediados de agosto. De entrada, ya se han suspendido oficialmente las reuniones de la Mesa y la Junta de Portavoces que estaban convocadas para este martes.