Los datos que ofrece el Servei d'Ocupació de Balears (Soib) son muy positivos en uno de los colectivos que más complicado lo tienen a la hora de buscar empleo. Actualmente hay 14.000 personas mayores de 50 años desempleadas, un 35 % menos que el año anterior. Conseguir un contrato laboral para este perfil, que se acerca a la jubilación, es todo una carrera de fondo. «Son personas en paro de larga duración, por lo tanto, estadísticamente, lo tienen más complicado a la hora de entrar en el sector laboral que otros colectivos, como los más jóvenes. Sin embargo, estamos viendo que en Baleares sucede todo lo contrario. Los más mayores se están beneficiando, cada vez más, de la creación de empleo y vemos así que se están reduciendo la tasa de paro entre estas personas», afirma el director general de Modelo Económico y Empleo, Llorenç Pou.
Uno de los motivos para entender este cambio serían los programas que ofrecen para su inserción laboral. Servicios que van aumentando año tras años y dan buenos resultados, como el programa Reactiva, que ofrece un puesto de trabajo en la Administración durante seis meses, o las formaciones duales que ofrece el Soib. Según las cifras que maneja la propia dirección, el 70 % de estos beneficiarios acaban encontrando empleo.
Perfil
Seis de cada diez desempleados mayores de 50 años son mujeres, pero los empleos a los que aplican son muy diversos, desde el sector servicio, mantenimiento hasta construcción. Por otra parte, la mitad de los desempleados inscritos en el Soib disfrutan de alguna ayuda económica, mientras que otra mitad no cuenta con ingresos.
Llorenç Pou recuerda que si bien son personas con una gran experiencia en el sector laboral debido a su edad, el hecho de no contar con estudios superiores complica más la búsqueda y más teniendo en cuenta la evolución laboral que vivimos, sumado a la competencia. El 75 % tiene, como mucho, estudios obligatorios (ESO).
«Lo que ahora observamos es que, gracias a la reforma laboral, los trabajos se consolidan más, ya no vemos tanta mala praxis en empresas como veíamos antes, por lo que estos beneficiarios suelen quedarse y crecer en la empresa, y más en un momento donde cotizar se vuelve fundamental para su jubilación», sostiene el director general.
Unas 5.000 personas han recibido orientación del servicio de Orientación Plus del SOIB, repartido en toda la Isla, accediendo a programas específicos para cada perfil. Para Pou, «a pesar de ser un colectivo que a priori preocupa, ya que antes veíamos que estar en esta fase de la vida significaba no cotizar ni tener ingreso, ahora vemos que tienen éxito».