La plataforma Moviment Feminista de Mallorca criticó ayer en un comunicado que la directora insular de Igualtat i Diversitat del Consell, Rosa Cursach, haya «vulnerado» la neutralidad de su cargo al «decantarse implícitamente» por el transactivismo, una de las corrientes dentro del feminismo. «Las responsables de organismos de igualdad deben mantener la neutralidad precisamente porque representan, o deberían de representar, a todas las mujeres de Mallorca y, en consecuencia, a todas las asociaciones feministas», manifestaron en la nota, como reacción a las declaraciones que Cursach hizo a este diario en una entrevista publicada el lunes.
La directora insular comentó que el Moviment Feminista de Mallorca, «la entidad, que no la sociedad», no acepta la Ley trans tal y como se ha aprobado, por lo que el colectivo transfeminsta decidió organizar otra convocatoria por el Día de la Mujer. «El debate sobre esto tiene que hacerse con seriedad y respeto por la identidad de la otra persona. No podemos no reconocer al otro. Si delante de mí tengo a alguien que dice ser un hombre, ¿qué le tengo que discutir? Sin embargo, hay determinados sectores que no lo reconocen. A través de las redes sociales no se puede debatir en condiciones», afirmó Cursach.
La plataforma rechazó que la política de Més les tildara de entidad, pues se consideran una coordinadora que aglutina asociaciones no mixtas y mujeres a título individual. En el comunicado admitieron que existen diferencias internas porque el feminismo es «diverso». «En un momento en que la discrepancia parece estar mal visto en determinados sectores de la izquierda, nos decantamos por reivindicar, más que nunca, la diversidad ideológica y la convivencia de distintas perspectivas.
«La directora da por hecho que el Moviment está en contra de la ley trans. No nos queda otra cosa que deducir que no nos ha leído o que, como mínimo, no lo ha hecho con suficiente atención», señalaron. «Siempre hemos defendido el derecho de las mujeres transexuales y sus derechos a una vida sin violencia y discriminación», insistieron, apuntando que «estarán atentas» a las partes de la ley y su desarrollo que puedan «colisionar» con los derechos de las mujeres o entrar en contradicción con el ideario feminista.
El Moviment censuró que Cursach diga que los partidos no deben apropiarse del feminismo: «Nos parece preelectoralismo descarado porque todos los partidos de izquierdas no han hecho otra cosa».