El Consell de Mallorca ha decidido duplicar la partida presupuestaria del plan de ayudas para la emancipación de jóvenes de Mallorca ante la elevada demanda, tras recibir prácticamente el doble de solicitudes de las previstas. Así lo han anunciado la presidenta del Consell, Catalina Cladera, y el conseller de Promoción Económica y Desarrollo Local, Jaume Alzamora, este viernes en una rueda de prensa. Estas ayudas, gestionadas por el Servicio Insular de Juventud, han agotado en un tiempo récord la inversión inicial, de un millón de euros, consignada en el presupuesto de 2023. Por ello, el Consell ha ampliado el presupuesto hasta los dos millones de euros para llegar a más beneficiarios. «La avalancha de solicitudes es una muestra del acierto al poner en marcha la iniciativa», ha argumentado Cladera.
El bono de emancipación es una ayuda a los gastos derivados de la emancipación, como suministros o muebles, y no una ayuda de alquiler o de acceso a la vivienda. El conseller ha remarcado que sólo la compra de muebles se ha encarecido en un año un 112 por ciento o que el mes de febrero, la factura media de la luz, ha sido 20 euros más cara que la de enero, según datos del Instituto Nacional de Estadística. «Teniendo en cuenta todo eso, es normal que tanto en Mallorca como al conjunto de Baleares nos situemos en la cola en datos de emancipación en el conjunto de la Unión Europea», ha dicho Alzamora. En Baleares la tasa de emancipación es del 16 por ciento, mientras que en Europa supera el 30 por ciento.
Alzamora ha insistido en que ésta «no es una iniciativa aislada» sino que tendrá continuidad en el tiempo y estudiarán fórmulas para mejorar la convocatoria. Por otro lado, en cuestión de vivienda Alzamora ha recordado que «el Consell ya ha cedido los solares que le quedaban en propiedad en Can Domenge para la construcción de vivienda pública, y más recientemente, ha transferido al Ibavi fondos para construir más viviendas públicas en régimen de alquiler».