La Associació Balear de l'Empresa Familiar (ABEF) debatió ayer en la Cámara de Comercio de Mallorca la gobernanza en las empresas familiares, para lo cual contó con la intervención del economista Manuel Bermejo y de la presidenta de la ABEF, Esther Vidal. El experto en asesoramiento a este tipo de empresas apuntó: «Uno de los grandes retos de la familia empresaria es trabajar la cohesión familiar para facilitar, de este modo, la transición generacional. Esto requiere predisposición y cambiar las tácticas por la estrategia».
Bermejo puntualizó que el «Consejo de Familia es clave para perfilar los planes estratégicos, la educación de las nuevas generaciones que se tienen que incorporar a la empresa y visualizar, con ello, el futuro. Se trata de tener una agenda estratégica y crear las mejores condiciones para que la continuidad sea un éxito y se desarrolle con fluidez y sin problemas de fondo».
Reconoció que la gobernanza es un reto para las empresas y más en Baleares, «ya que los conflictos familiares se producen por la falta de comunicación». Aclaró, para justificar esta afirmación, que «solamente una de cada tres empresas tiene conformado o creado un Consejo de Familia». En su opinión, en las empresas de las Islas, como punto de partida y de futuro, «tienen que hacer un gran esfuerzo generacional para institucionalizar la relaciones familiares. Hay que huir de la informalidad porque no lleva a ningún lado».
Indicó que cuando la interrelación entre las distintas generaciones funciona «las empresas son más rentables, más sostenibles y con mayores índices de éxito porque se trabaja mejor». Un aspecto que consideró esencial fue el papel de los asesores externos «porque se convierten en una palanca para potenciar la buena gobernanza». El asesor externo genera más transparencia «porque aporta un criterio de independencia en su visión, racionaliza los debates, impide que se sea juez y parte en las discusiones y, además, propicia un ejercicio de rendición de cuentas».
La presidenta de la ABEF, dentro de esta dinámica, explicó el ejemplo práctico de funcionamiento de su empresa familiar. «El Consejo de Gobierno es esencial, así como el asesoramiento externo para configurar un protocolo familiar y disponer de un plan estratégico. Su puesta en marcha te hace poner la vista en el mañana y lograr que la empresa perdure», explicó Vidal. Afirmó que involucrar a toda la familia es fundamental «porque ayuda a hacer mejor las cosas y actuar con resiliencia y perseverancia». Añadió que, en su caso, realizan de forma periódica una asamblea familiar «para implicar a todos».