Los bonos descuento para la compra de productos de Mallorca, que suponen un descuento de 20 euros por cada compra superior a 40, se podrán utilizar a partir de este martes, según ha informado la presidenta del Consell, Catalina Cladera. Cladera ha detallado que esta campaña busca «fomentar» el comercio local y los productos artesanos ya que los bonos se pueden utilizar únicamente para la adquisición de productos ecológicos que tengan la correspondiente certificación del Consejo Balear de la Producción Agraria Ecológica, productos elaborados por artesanos con acreditaciones de la Dirección Insular de Comercio y Artesanía, y productos protegidos por las Denominaciones de Origen o Indicaciones Geográficas Protegidas propias de la isla.
Los bonos serán válidos en los 142 establecimientos adheridos e intercambiables a partir de este mismo martes. Asimismo, habrá un límite de cinco bonos por persona y, cada bono, supondrá un descuento de 20 euros por cada 40 de compra.
La iniciativa, en la que se ha invertido 22 millones de euros, se enmarca dentro de las ayudas a jóvenes, familias, personas mayores, sector cultural, empresas y autónomos. Con el objetivo, ha indicado Cladera, de aligerar el aumento generalizado de los precios. «No sólo ayudamos al consumidor en su compra del producto ecológico y mallorquín, sino que también estimulamos la economía local en todos los municipios de la isla, con un apoyo extra a nuestro tejido comercial y productivo».
Impacto económico y medioambiental
El conseller de Promoción Económica y Desarrollo Local, Jaume Alzamora, ha explicado que, con esta campaña, el Consell moviliza un millón de euros que «tendrá un impacto real directo de dos millones de euros», puesto que los bonos que se pondrán en circulación serán de un descuento de 20 euros en compras de 40. «Es decir, subvencionamos la mitad de las compras y, por lo tanto, se duplica el volumen de negocio», ha detallado.
Sin embargo, según Alzamora, la campaña de estos bonos de compra podría tener un impacto económico superior, ya que, en base a campañas anteriores la población «aprovecha y acaba haciendo un gasto ligeramente mayor».
Alzamora también ha incidido en que se ha dinamizado la cuenta de resultados de autónomos, pymes, cooperativas y artesanos con esta campaña. «El producto de recorrido corto tiene una ventaja sobre la economía local: genera lugares de trabajo, revierte directamente y el dinero que se mueve se queda en Mallorca».
Por último, Alzamora ha explicado que, a pesar de que la campaña tiene un claro componente económico, hay un beneficio medioambiental, puesto que las producciones locales son «más tradicionales, menos agresivas y con mecanismos más sostenibles», además de tener un traslado más corto y con cargas de contaminación menores.