La comisión de Asuntos Institucionales del Parlament retocará el proyecto de iniciativa legislativa popular de bienestar para las futuras generaciones presentado por el GOB. Lo hará con el aval del grupo ecologista y después de acordarlo con los partidos que forman la mayoría de izquierdas, según han confirmado ambas partes. A este acuerdo se llegó el miércoles y se escenificará la semana próxima en una comisión en la que intervendrá la portavoz de la organización ecologista, Margalida Ramis.
El proyecto de ley, que fue tomado en consideración por el pleno de la Cámara en noviembre del año pasado -lo defendió el presidente ecologista, Amadeu Corbera-y se aprobará esta legislatura. De hecho, será una de las últimas leyes que acuerde el Parlament antes de las elecciones.
La propuesta llegó a la Cámara después de una recogida de firmas. Será la primera iniciativa legislativa popular que aprobará el Parlament en sus cuarenta años de existencia, los mismos que cumple el Estatut. El cambio pasa por adaptar a la legislación actual la propuesta de creación de una comisión que evalúe los proyectos que inciden en el bienestar de generaciones futuras. Su rango será similar al de otras comisiones asesoras.
Las dos partes han mostrado su satisfacción. Un asunto que queda fuera es la posibilidad de convocar una consulta popular cuando existieran discrepancias. También quedará claro que la comisión que evaluará los proyectos será elegida por el Parlament, como ocurre con organismos de control. Esta comisión, formada por expertos, evaluará leyes, planes y programas. El GOB asume que si esa comisión tuviera que decidir sobre todo, se bloquearía la actividad de la Cámara.
Esta es una de las cuatro leyes que tiene pendiente aprobar el Parlament antes de que quede formalmente disuelto el 3 de abril para que se convoquen las elecciones del 28 de mayo.