El conseller de Mobilitat y Habitage, Josep Marí, justificó ayer la gestión del Govern en su política de vivienda. Lo hizo en respuestas a preguntas del PP y también a una interpelación de Ciudadanos (Cs), que presentó Marc Pétez-Ribas. Aunque no intervino durante una moción ampliamente aprobada que defendió Josep Castells (Més per Menorca), sí comentó algunos aspectos fuera del salón de sesiones. Marí, dentro y fuera del pleno, admitió que es un asunto difícil, que se podía hacer más y que el Govern está en el camino correcto. También se desmarcó de la propuesta de pisos contenedores, aunque recordó que en otras ciudades se ha intentado, y dijo que seguía abierta la búsqueda de fórmulas que supongan una «excepcionalidad balear» para vencer la prohibición de la legislación europea a restringir las ventas de viviendas a no residentes.
A este asunto se refirió también la consellera Garrido, que afirmó que no interpretaba la respuesta del Gobierno a Podemos, recordándole que la UE ampara el derecho a adquirir segundas residencias a cualquier ciudadano de la UE, como un no a negociar. De hecho, uno de los puntos de la moción de Més aprobada ayer insta al Govern a remitir a los grupos en los próximos 30 días los resultados de la comisión creada para estudiar este asunto. Podemos pidió al PSIB «valentía». En declaraciones a los medios y en comentarios por Twitter, cargos de Podemos, también el vicepresidente Yllanes, recuperaron el lema «sí se puede». Josep Marí, el conseller de Mobilitat, echó mano de cifras para justificar la gestión del Govern.
Según el conseller, en 2015 había 1.700 viviendas de protección y en estos años el parque público ha crecido en 1.300. De acuerdo a las previsiones del titular de Mobilitat, «es tres legislaturas se puede llegar a 15.000». Marí recordó las dificultades para hallar solares edificables y también que hay municipios que colaboran más y otros menos. También destacó la colaboración pública y privada.
Sebastià Sagreras, diputado del PP, se centró en la propuesta de los contenedores y dijo que «el Govern se pliega a propuestas de Podemos y Més» y que «en mi pueblo, los contenedores son para la basura, no para que vivan las personas» y que «plantar eso es el colmo». Marí le dijo que nunca lo había planteado. La Asociación Balear de Inmobiliarias Nacional e Internacional, celebró que el Gobierno estatal recuerde que no puede vetar las compras de no residentes.