El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ha animado a las iglesias de la isla a sumarse el próximo lunes a la misa exequial por el papa emérito Benedicto XVI, fallecido el 31 de diciembre, haciendo sonar al unísono las campanas en toque de difuntos a las 10 de la mañana.
Taltavull ha dirigido una carta a la diócesis en la que anima a suprimir las misas vespertinas del lunes 9 para unirse al funeral previsto en la Catedral a las 19 horas y a realizar ese toque de campanas unísono a difunto.
En la carta, el obispo alaba el legado de Benedicto XVI y explica que el funeral en su memoria del lunes será también un acto de agradecimiento «por todo lo que ha aportado a la Iglesia y a la humanidad a lo largo de su vida», por medio de «su sabiduría amable y humilde». Como ya había anunciado el mismo día del fallecimiento del papa emérito, recuerda que la misa funeral en la catedral de Mallorca se celebrará el lunes 9 de enero a partir de las 19 horas.