Igual que Raúl Romeva –aunque invitada por la Assemblea Sobiranista de Mallorca (ASM)–, Dolors Feliu participó en la manifestación de ayer. Feliu preside la Assemblea Nacional Catalana (ANC), promotora de la movilización del último 11 de Septiembre en Catalunya que, además de la reivindicación independentista, estuvo marcada por las críticas a cómo una parte del independentismo, concretamente el sector de ERC, había encarado los años transcurridos desde el referéndum de 2017.
«La manifestación fue por la independencia pero llevamos 5 años y es como si la clase política no reaccionara», explicó ayer. Y añadió que aquella convocatoria fue un modo de «decirle que si no lo hacían ellos, había otras opciones, y que si no daban el paso estaba la ANC».
Feliu, abogada que militó en CDC y en el PDECat, afirmó sobre la estrategia de ERC que «cada cual tiene la suya pero nosotros no estamos por un diálogo falso». La activista, que relevó a Elisenda Paluzie al frente a la ANC, entiende que «el Estado ya ha dicho que el diálogo, hablar, no lleva a la independencia y lo que quiere es que se acabe el ‘procés'». Sobre si la independencia de Catalunya está ahora más lejana que en 2017 opina que «la tuvimos cerca pero quedó pendiente» y que no se puede esperar nada del Gobierno español.
La opción de Mallorca
Sobre la opción que debe tomar Mallorca, Feliu indicó que «Mallorca tiene que tomar su propio camino» pero que está claro que «compartimos unas mismas raíces» y vínculos como la lengua y la cultura». Sobre qué mensaje daría para encarar un proceso similar, indicó que el protagonismo corresponde a Mallorca y al resto de Islas y que es importante que «se reconozcan en sí mismas». Feliú se reunión con dirigentes de la ASM antes de la manifestación.