Las mujeres reclaman la noche como espacio seguro

La plaza París de Palma se ha iluminado con una intención clara, la de reclamar la noche como un espacio seguro para todas las mujeres. Poco más de medio centenar de personas han participado en la marcha nocturna no mixta que organizó el Moviment Feminisme de Mallorca, pero que desde 2020 se ha visto interrumpida por la pandemia.

Esta movilización lleva detrás todo un símbolo histórico feminista. La marcha surgió en 1980 debido a numerosos crímenes contra las mujeres. Como respuesta a la reacción policial, que instó a no salir de noche e implantó un toque de queda para ellas para evitar más asesinatos, un grupo de mujeres feministas salieron a manifestarse «reclamando la noche» y poniendo el foco en el agresor, compartió Maria José Busquets, portavoz del Moviment.

En Mallorca, el colectivo –ya inexistente– Geneta recuperó la herencia en 2015 y ese mismo año empezó la primera de las marchas nocturnas. El lema que acompaña la movilización es El carrers són nostres, cuyo objetivo es reivindicar calles seguras ante el aumento de agresiones sexuales. «Más de cuarenta años han pasado y seguimos igual», comentaron Bel Pomer y Cati Sbert, dos participantes, que lamentaron «¿Dónde están las mujeres?», por la baja participación de la marcha.

A las 21.00 horas, las participantes han empezado a caminar con las antorchas y velas hacia el carrer Blanquerna. Vestidas de negro o lila, algunas han acudido con pancartas reivindicativas, donde se podían leer frases como ‘Cap agressió sense resposta' o ‘Vull esser lliure, no valenta'. La marcha nocturna ha acabdo enfrente de los Juzgados con gritos, aplausos y ganas de luchar contra las violencias machistas.