Un informe de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo planteó este martes una serie de mejoras al sistema de protección de menores tuteladas en Baleares para dotarlo de más «personal, fondos y profesionalidad de las plantillas» y evitar que se den casos como los supuestos abusos sexuales denunciados en 2019. Es una de las conclusiones que extrae la misión del Parlamento Europeo que viajó a Baleares en abril de este año para recabar información sobre los casos de abusos a menores tuteladas por el Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS), cuyo borrador de informe se debatió este martes en la comisión de Peticiones por primera vez y al que se le podrán proponer enmiendas durante dos semanas.
El texto recoge los testimonios de las reuniones que mantuvieron los diputados en Mallorca con las madres de las menores afectadas, los periodistas que destaparon el caso, el Govern balear, el fiscal delegado de la sección de menores y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado en las islas, entre otros. Las enmiendas y el texto final se votarán en una fecha aún no definida a finales de noviembre. El sistema de tutela, señala el borrador inicial, «debe mejorarse con mayor dotación en personal, fondos y profesionalidad de las plantillas»: «Habría que replantear el sistema, creando centros de protección específicos de menores con problemas de conducta».
«El problema de la explotación sexual de menores tutelados en Baleares es polifacético y requiere una acción integral por parte de todas las autoridades competentes. La complejidad de la situación exige reforzar la cooperación y mejorar la comunicación entre los diferentes actores, (que) deben colaborar de forma estrecha y eficaz», subraya el informe. El texto apunta a las fugas de los centros de acogida como «el indicador de mayor peligro» que «debería alertar» a los responsables de esos menores y también a la «importancia de mantener la comunicación con los padres de los niños», de la prevención, la lucha contra el fracaso escolar o la drogadicción. Las recomendaciones del borrador van desde «replantear el sistema de protección de menores tutelados a nivel autonómico, nacional y europeo» y «fijar unas bases mínimas comunes de los sistemas de protección» hasta, para el caso concreto balear, crear centros de protección específicos de menores con problemas de conducta.
La recomendación final del informe apunta a dejar la petición abierta y pedir su opinión a las autoridades españolas, una posibilidad que rechaza el PSOE pero sí quieren partidos como el PP y Vox. En el debate entre los diputados, el socialista Ibán García del Blanco consideró que el texto «refleja muchas buenas recomendaciones sobre cómo mejorar el sistema de tutela de menores en la UE» y pidió evitar «tentaciones de sectarismo» a la hora de plantear y votar las futuras enmiendas. Desde el PP, Rosa Estarás afirmó que el envío de la misión y la redacción del informe «no está para ni apoyar ni criticar a ningún gobierno sino para que nunca más normalicemos que una niña de 12 años pueda caer en prostitución y explotación sexual y no pase nada».
Por su parte, Hermann Tertsch (Vox) criticó la «voluntad de encubrimiento» que a su juicio ha habido con este caso por parte de «partidos de la izquierda y separatistas» en España y pidió «agilizar procedimiento para restitución de menores a sus padres o tutores legales». «Nuestra tarea es vigilar para que no vuelva a ocurrir algo tan espantoso como la explotación sexual de menores vulnerables, que deben ser amparados y tutelados eficazmente por instituciones responsables, sean objeto de explotación sexual», concluyó por su parte la diputada de Ciudadanos Maite Pagazaurtundúa.