La documentación del PSOE en las Islas desde su refundación como Federació Socialista Balears (FSB), cuando se legalizaron los partidos políticos a la muerte de Franco, está contenida en algo más de 1.600 cajas que se agrupan en 16 palés almacenados en depósito en el Arxiu del Regne de Mallorca para su revisión y anotación. También conserva documentos de décadas anteriores y publicaciones del partido anteriores a la Guerra Civil, aunque no constituyen el elemento principal.
Algunas de esas cajas conservan documentación de la campaña para las elecciones del 29 de octubre de 1982. Hay copias y reproducciones de carteles, no originales pues es muy posible que si queda alguno se guarde como una joya por quien los conservara. Lo que sí se guarda es una guía de instrucciones que firma Alfonso Guerra (vicesecretario general y coordinador de la campaña) y que lleva en cubierta la palabra ‘confidencial'.
En ella se informa de cuál debe ser la estrategia general del partido, se informa de la existencia de tres encuestas y se fija cuáles son los «adversarios del partido». El primero era la UCD y el segundo el PCE. También se informa de «las previsibles líneas de ataque» al partido y de qué manera responder. Algo que se señalaba de forma positiva es que «desciende el abstencionismo activo».
Las personas que han compartido sus recuerdos con este periódico destacan el papel que jugó Alfonso Guerra en aquella campaña. Emilio Alonso, que dice que todavía habla con él «de vez en cuando», recuerda que «clavó los resultados» de las elecciones cuando el Gobierno no había empezado a dar datos. «Hacía poco que habían cerrado los colegios y salió a decir que el PSOE conseguía 202 escaños», dice. Y añade: «Fue muy importante. No sólo demostramos que se podía ganar, sino que el PSOE tenía medios para gestionar mejor».