De las 469 consultas médicas de Atención Primaria en Mallorca, hay 51 plazas, es decir, un 10 %, que están sin cubrir. A efectos prácticos, para el ciudadano esto se traduce en que hay unas 90.000 personas que no tienen un médico de cabecera asignado; y para el colectivo sanitario significa que deben sumarlos a su día a día «cuando ya van con el agua al cuello», explican sus representantes en el Sindicato Médico. Para los afectados «la atención y la calidad se ve mermada porque no los conoces y un día ven a un médico y al siguiente a otro, van danzando por ahí», argumentan. No sólo eso, además «provoca una sobrecarga en las consultas de facultativos, con cupos de pacientes ya hinchados, que hace que el personal se esté quemando y desgastando con 40 y 50 visitas diarias», añaden.
Simebal denuncia que en Mallorca los médicos de familia tienen, de media, asignadas unas 1.769 cartillas cuando las sociedades científicas recomiendan que sean 1.300 para tener un sistema sanitario en regla. El problema se agrava con los pediatras de los centros de salud. Ellos ven a 1.187 pacientes cada uno de media cuando lo óptimo son 800. Si se tiene en cuenta que falta cubrir a 51 médicos de una plantilla de 469 y que, además, los que hay tienen una sobrecarga de pacientes de 470 más de lo recomendado de media, el sindicato profesional calcula que el déficit es de 350 especialistas en medicina de familia en las Islas.
La carencia es tan acuciante que incluso la consellera de Salut lo ha reconocido esta semana. Tras hacerse público un informe del Consejo General de Enfermería en que el se estimaba que hacen falta 3.000 enfermeras más para que Balears llegue a la media europea de profesionales por paciente, se le preguntó a Patricia Gómez cuál era la especialidad sanitaria más comprometida en las Islas. «En estos momentos, a nivel global, el servicio más deficitario es el de los médicos de familia», lamentó.
Urgencias y Atención Primaria
Y si la situación no es fácil en las consultas ordinarias de los centros de salud, peor están las Urgencias cuya demanda lleva casi un año en incremento. En Palma existen tres Servicios de Urgencias de Atención Primaria. Son los SUAP de Son Pisà, s'Escorxador y Escola Graduada. La plantilla de médicos que cubren el servicio más allá del horario diurno es de 44 profesionales pero sólo 19 de ellos tienen la plaza asignada con titularidad. «El resto se ha ido a otros servicios, está de baja, jubilado o ha pedido un traslado… Son vacantes que, cuando se cubren, lo hacen con contratos eventuales», explican desde el sindicato. La plantilla médica de los SUAP, aseguran, «está totalmente infradotada. Es una servicio muy castigado porque el personal es mayor y son pocos», añaden.
La penosidad de un servicio como éste, con horas de noche y falta de personal, hace que haya verdaderos problemas de cobertura que se han agravado en verano. Tanto es así, que si el segundo fin de semana de junio hubo siete descubiertos, para el puente del 15 de agosto fueron dieciocho. Ahora, advierten que lo habitual es que donde tienen que haber tres médicos haya dos o solo uno. Como se recordará los mismos facultativos del servicio lo denunciaron hace días, aseguran que los médicos prefieren cubrir plazas en las que podrán hacer horas extra, que no acudir a un servicio en precario.
Pero los problemas no acaban aquí, también están los PAC móviles, que son los médicos de part forana que disponen de un coche para atender urgencias en diferentes municipios. «Hay 38 plazas y, actualmente, ninguna de ellas está cubierta con un titular», denuncian. Es más, las mismas fuentes aseguran que ésta ha sido la tendencia del verano, «los médicos de guardia no han tenido el apoyo móvil». Hace dos meses, 428 médicos de familia remitieron una carta a la consellera de Salut proponiendo hasta doce medidas para mejorar las condiciones laborales, pero hasta la fecha, dicen, no se ha cumplido ninguna.