«A los restauradores no nos queda más remedio que subir los precios». Así de claro lo ha dejado el presidente de Mallorca CAEB Restauración, Alfonso Robledo, que ha argumentado que «se está encareciendo todo y no para». En este sentido, ha precisado que la subida media estará en torno al 10 por ciento y afectará, en los establecimientos que así lo decidan, tanto al menú del día como a los platos de la carta.
Robledo ha insistido en que los restauradores lo han intentado todo antes de subir los precios, ya que son conscientes de las dificultades de los ciudadanos que ya están padeciendo las consecuencias de la inflación; el dato provisional del pasado mes de agosto en España es del 10,4 %, 4 décimas menos que en julio por el abaratamiento de los carburantes. En este sentido, algunos han cambiado los menús y las cartas. Por citar algunos ejemplos, han sustituido los alimentos fritos por otras opciones más económicas, puesto que tanto el precio de la electricidad como el del aceite están disparados; algo parecido ha sucedido con el pollo. También han reducido las opciones de platos para poder tener menos alimentos y reducir el número de cámaras frigoríficas con la finalidad de reducir la factura de la luz.
Sin embargo, no ha sido suficiente y muchos restauradores de las Islas comenzarán el mes de septiembre con una subida de precios. Lo han justificado porque la electricidad sigue batiendo récords prácticamente diarios y la cesta de la compra no para de subir. Consubal cifra el encarecimiento de la cesta de la compra en las Islas en un 34,7 %. Se trata de una cantidad bastante más elevada del 10 % de media que piensan subir los restauradores.
Palma tiene el tercer menú del día más caro de España
Palma tiene el tercer menú del día más caro de España, según el último informe de la asociación Hostelería nacional. En concreto, el precio medio del menú del día en la capital balear es de 13,6 euros. El más costoso de todo el país es el de Barcelona, que vale 14 euros; seguido de Madrid, donde el valor medio es de 13,9 euros. En este punto, los empresarios del sector de la restauración de las Islas han argumentado que el nivel de vida en las Islas es más elevado que en la Península. Sólo por citar algunos ejemplos, tanto el alquiler como los productos de alimentación se encuentran entre los más caros.