Endesa ha logrado reciclar, en el primer semestre del año, 7.051 toneladas de residuos procedentes de la red eléctrica de Baleares, con el objetivo de poder reutilizarlos, total o parcialmente, o que se puedan tratar en centros especializados para recuperarlos o transformarlos. En nota de prensa, la entidad ha detallado este martes que tienen en las Islas más de 18.000 kilómetros de líneas eléctricas, «de manera que cuando se hacen tareas de mantenimiento y mejora se generan, inevitablemente, residuos». Por todo ello, la compañía ha apostado por la economía circular como base de un modelo económico más sostenible, tratando de aprovechar al máximo los recursos materiales.
En este punto, han señalado que se recupera cableado eléctrico, baterías o acumuladores, al tiempo que se regeneran o dan nuevos usos a los aceites minerales utilizados en subestaciones eléctricas y se reciclan o recuperan metales o compuestos metálicos. En 2021 se llegaron a reciclar, de las tareas de mantenimiento de la red de distribución, un total de 13.656 toneladas de residuos, de las que 10,3 eran de papel y cartón, 15,2 de componentes de equipos y aislantes, 44 de madera, 9,6 de vidrio, 8,5 de cobre, 11,1 de aluminio, 1,6 de plástico, 48,3 de diferentes tipos de cables, 243 de chatarra y más de 13.146 de residuos de construcción y demolición. En cuanto a los residuos especiales, 45,8 toneladas procedían de aceite dieléctrico, 14,9 de equipos de hexafluoruro, 18,6 de otros equipos electrónicos y cinco de contadores electrónicos.