Malas noticias para los inquilinos. El precio del alquiler aumentará en Baleares por la subida del Euríbor, según las previsión de la presidenta de la Asociación de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Baleares (API), Natalia Bueno. El motivo es que la escalada del citado indicador, que ha cerrado el mes de julio en el 0,992 %, está provocando una carestía de las hipotecas, al tiempo que más dificultades para poder acceder a ellas. En este sentido, ante el encarecimiento del precio del dinero los bancos han optado por endurecer las condiciones de los préstamos hipotecarios a tipo fijo y prefieren concederlos a tipo variable. La previsión es que el principal indicador de los créditos a tipo variable siga subiendo y, por tanto, estos encareciéndose.
Ante este panorama de incertidumbre y de incremento de costes, Bueno prevé que los ciudadanos se decanten más por la opción de alquilar una vivienda que por la de comprarla. Estamos ante la ley de la oferta y la demanda, que provocará un encarecimiento de los arrendamientos. «La subida de las hipotecas y el endurecimiento de lo requisitos para acceder a ellas reducirá el número de personas que podrán conseguir una y, por tanto, subirá la demanda de alquileres». A esto añade el crecimiento de la población que se está produciendo en las Islas.
Preguntada por el alza que podrían experimentar los alquileres, responde que «no se puede predecir con exactitud el porcentaje de subida porque está en relación a la creación de empleo y al incremento poblacional; y con la incerteza derivada de la guerra de Ucrania. No se pueden hacer cálculos porque todo cambia rápidamente». Sí señala que las zonas en las que más se alzará el precio de los arrendamientos, estas serán las más demandadas; destaca el caso de Palma ciudad, principalmente.
Pau A. Monserrat, miembro del CES, profesor de la UIB y economista de FuturFinances.com, comparte la opinión de la presidenta de la API. «Ciertamente alquilar o comprar mediante financiación hipotecaria son dos productos sustitutivos. Cuando se necesita un hogar, las dos opciones básicas son alquilarlo o comprarlo. Si se complica el acceso a la financiación hipotecaria, sea por un endurecimiento de los requisitos de riesgo o por un aumento de los tipos de interés y el consecuente incremento de las cuotas mensuales, se produce un trasvase de la demanda hacia el alquiler, que provoca un aumento de los precios».
Sin embargo, Luis García Langa, director de Corredordefondos.com, discrepa de estos planteamientos. En este sentido, sostiene que «la teoría nos dice que el precio debería bajar. Si hablamos de vivienda de clase media, la subida de tipos debería abaratar los precios, ya que las familias no pagan un piso de 'x' euros, pagan una hipoteca de 'x' euros. Por lo tanto, al subir las cuotas de las nuevas hipotecas deberían bajar los precios. A eso hay que unir la ralentización económica (hay quien habla de recesión, algo que hoy parece todavía lejano) y de incertidumbre que no favorecen al mercado inmobiliaria que es muy cíclico. Por ejemplo, si los sueldos no suben, si hay despidos, si hay cierre de empresas, las familias no podrán pagar los precios de épocas de bonanza con lo que los precios deberían bajar. Esto se debería trasladar al mercado del alquiler».
No obstante, reconoce que «muchos alquileres son de familias cuyo argumento es 'el alquiler me paga la hipoteca' sin tener en cuenta gastos de compra, de mantenimiento, fiscales, momentos de no tener inquilinos, impagos, etc. que hacen que no sea cierto. Pero muchas de estas familias, especialmente en momentos económicamente malos, necesitan ajustar el alquiler que cobran a la hipoteca que pagan». En este punto, se pregunta qué pesará más a la hora de fijar el precio del alquiler. «La teoría nos dice que los precios de alquiler en un entorno así deberían bajar pero esta especial coyuntura en España hace que lo dude».
El apunte
El precio del alquiler no se puede incrementar tanto como la inflación
El precio del alquiler no para de subir en Baleares y se prevé que lo haga aún más debido al encarecimiento de las hipotecas. El mercado inmobiliario no es ajeno a la inflación, que cerró el pasado mes de julio en el 10,8 %. Sin embargo, la presidenta de la Asociación de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears (API), Natalia Bueno, ha aclarado que los propietarios no pueden subir el precio del alquiler a sus inquilinos tanto como lo haga la inflación.
Esto se debe a que la subida del alquiler respecto al IPC está limitada al 2 % hasta el próximo 31 diciembre debido a un decreto que aprobó el Gobierno durante la pandemia de la COVID-19. La presidenta de la API sostiene que «s predecible que con esta inflación a final de año vuelva el gobierno a prorrogarlo».