La llegada de 5.824 nuevos inmigrantes extranjeros salvó a Balears de perder población durante el año 2021. Sin ellos, las Islas no habrían podido compensar la marcha de residentes de las Islas a otras comunidades. El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó este martes los datos del Censo de Población, que ponen en evidencia que Balears es una de las pocas autonomías que no pierden población. Baleares apenas ha crecido en 4.186 habitantes en el último año, muy lejos de las cifras de principios de siglo, cuando la población aumentaba con más de 20.000 habitantes cada año.
Esas cifras reflejan una realidad que se puede resumir en lo siguiente: llegan inmigrantes extranjeros, se van residentes de las Islas a otros territorios de España y el crecimiento vegetativo de las islas, es decir, la diferencia entre nacimientos y defunciones se estanca. Las cifras que corresponden a cada una de esas realidades son las siguientes: llegaron 5.824 nuevas residentes extranjeros; se fueron 2.279 residentes a otras comunidades y el saldo vegetativo fue de 688 nuevos residentes.
En toda España se dio un fenómeno parecido y esos 148.677 inmigrantes extranjeros compensaron la caída del crecimiento vegetativo, que fue de 113.023 personas. Eso significa que en España ya mueren 113.023 personas más de las que nacen.Los expertos alertan de que este fenómeno es muy negativo y ya se da en 14 comunidades autónomas y en territorios muy envejecidos, como Galicia o Castilla y León, el saldo vegetativo negativo comienza a ser alarmante. Hay un dato significativo de los que ayer colgó el INE: por segundo año consecutivo, Balears presenta un saldo negativo en los movimientos entre la comunidades. Eso significa que se fueron a la Península más personas de las que llegaron, algo que los expertos relacionan con la vuelta a las comunidades de origen por la pérdida de trabajo como consecuencia de la pandemia.