El PI quiere dedicar este fin de semana a planificar el «Horizonte 2030». Eso es el «cambio de ciclo» que –según recoge en un documento político que publicó este diario el domingo– se iniciará con las elecciones del próximo año, en las que el partido que se fundó en 2012 de la confluencia de Convergència per les Illes (el partido de Josep Melià) y Lliga Regionalista (fundado por Jaume Font) quiere ser decisivo. El PI apuesta por el «centro» pero no se conforma con estar presente en las instituciones autonómicas, insulares y locales. Quiere representación en Madrid.
Mañana viernes y el sábado ha organizado dos debates. En ambos participaran los dirigentes de dos formaciones en las que se mira el PI: Coalición Canaria (CC) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV). Fernando Clavijo, secretario general de CC, y Andoni Ortuzar, presidente del segundo, explican aquí algunas de las cuestiones que abordarán estos dos días.
El PNV es, junto al PSOE, el partido con más historia de los que todavía tienen presencia en la política estatal. Su presidente tendrá ocasión de explicar a los dirigentes del PI algo que ha permanecido invariable desde su fundación: la incompatibilidad de cargos orgánicos e institucionales. El PI, que ahora preside Tolo Gili, no ha elegido todavía sus cabezas de lista para las elecciones de 2023.