Baleares espera duplicar las llegadas turísticas del año pasado y regresar así a niveles prepandémicos. Para ello será imprescindible recuperar a siete millones de turistas extranjeros que la crisis sanitaria ha mantenido alejados de las Islas en estos dos últimos años y que si la evolución de la temporada confirma el récord histórico al que apuntan las previsiones, deberían alcanzar los 14 millones.
Igual que sucedió con el resto de países del entorno, el sector tiró del turismo interior para mantenerse a flote y las visitas nacionales no se quedaron lejos de las de 2019 (2,4 millones frente a 2,7). La diferencia que marcó el coronavirus se notó en el mercado internacional: 13,7 millones en 2019 por 6,3 millones en 2021. Con todo, la guerra en Ucrania ha enfriado las expectativas de principios de año, que contaban con reventar las estadísticas gracias a un turista deseoso de regresar al Archipiélago tras superarse la pandemia.
La preocupación en torno al conflicto bélico y a sus derivadas económicas va a ser un denominador común en los mercados emisores, aunque su graduación variará en función de cada país al igual que lo harán otros condicionantes, como los relativos a destinos competidores. La recuperación será desigual, por ejemplo, en los dos principales mercados, alemán y británico, cuyas economías afrontan de diferente manera el inmediato escenario pospandémico.
ALEMANIA
El primer mercado tiene más reservas que en prepandemia. El alemán es el mercado que muestra una mayor recuperación, después de haber caído de los 3,7 millones de visitas en 2019 a los 2,3 millones de 2021. Balears competirá con Italia, Grecia y Turquía por su favor. El primer país es destino prioritario en intención de viaje –segundo tras España– y la turoperación ha hecho una apuesta muy fuerte por los otros dos. La percepción de las Islas –y de España en general– como destino seguro y de confianza juegan a favor.
De natural organizado y previsor, el alemán acostumbraba a hacer sus reservas en enero, pero primero la pandemia y luego la guerra han roto esa norma, por lo que se prevé otro año de reservas con poca antelación. Pese a ello, las reservas en aerolíneas IATA (no incluyen bajo coste ni chárter) en el primer trimestre en Balears están un 21 % por encima de las de 2019.
Reino unido
Las Islas empiezan a ser caras para los británicos. De 4,5 millones de turistas en 2019 a poco más de un millón en 2021. La caída del mercado británico, segundo en importancia, fue mayor que la del alemán y su recuperación se presume bastante más costosa. Aunque el fin de las restricciones ha espoleado los planes de viaje (y con Balears aún como destino preferente), la incertidumbre económica es mayor que en otros mercados por el efecto ‘Brexit'.
La capacidad adquisitiva del británico está mermada y el volumen de gasto ha descendido, una tendencia que se va a mantener con la libra esterlina en situación de caída libre (está a 1,17 euros). Las reservas no llegan a las de época prepandémica y encuestas recientes confirman lo que se podía deducir con todos estos ingredientes sobre la mesa: que las Islas están volviéndose demasiado caras para el bolsillo británico.
Bélgica y Países Bajos
Las visitas hasta marzo superaron en un 30 % las de 2019. La suma de los visitantes de ambas nacionalidades rozaba el millón en 2019 (los neerlandeses triplicaron a los belgas). Balears y España en general continúan siendo destinos preferentes para estos mercados y la recuperación de las conexiones permiten pensar en una restauración de las cifras prepandémicas o incluso en superarlas. De hecho, en los tres primeros meses de este año las llegadas de belgas y neerlandeses han aumentado un 30 % respecto a las de 2019.
ITALIA
Reservas de último momento pero con estancias más largas. Sus cifras se mantienen cercanas a las de 2019 en el primer trimestre, en torno a los 10.000 visitantes y con perspectivas de alcanzar los 728.000 con los que se cerró ese año. Por entonces, Eivissa y Formentera se mantenían como destino preferente con más de la mitad de las llegadas (401.713) y no parece que en 2022 vaya a diferir mucho esa tendencia.
Los touroperadores informan de que han tenido buenos resultados de ventas hasta el momento para Canarias y las solicitudes de reservas para Balears ya se han activado, aunque se espera que prime una tendencia al último momento. También se observa una preferencia por las estancias más largas. La excelente conectividad y el ritmo de recuperación de la economía y la demanda dibujan buenas perspectivas.
FRANCIA
Mercado al alza que va a priorizar cercanía y seguridad. La pandemia espoleó los viajes de franceses a Balears en detrimento de otros competidores mediterráneos como Marruecos o Túnez, más lejanos y con menores garantías sanitarias. La guerra anticipa un panorama muy parecido para este año, en el que la proximidad geográfica será decisiva: el turismo interior sigue siendo dominante pero España va a ser la primera elección internacional.
Asimismo, los franceses parecen haber redescubierto las Islas en los últimos años y la reactivación de la línea marítima de Corsica-Sardinia Ferries que conecta Toulon con Alcúdia es un acicate añadido para las invasiones galas. La economía francesa prosigue su recuperación a un ritmo sostenido y estamos hablando del tercer mercado internacional para Balears ahora mismo dada su ligera ventaja sobre los italianos (en 2019 llegó a su máximo histórico de llegadas con 763.000). El francés coincide además con un perfil de visitante de calidad, interesado en cultura, gastronomía y deporte.
PAÍSES ASIÁTICOS
Mercado fiel y gastador pero todavía emergente. Solo su mención como dato exótico justifica su inclusión en esta lista, ya que en términos de volumen el mercado asiático sigue siendo marginal para Balears. Máxime cuando el interés en destinos españoles se centra en Barcelona y Madrid, como en el caso de los hindúes. No obstante, se trata de un mercado en auge del que se ignora su alcance a medio-largo plazo pero que presenta algunos inputs interesantes de cara al futuro, como su gran fidelidad a destinos que le satisfacen.
La guerra en Ucrania y el encarecimiento energético, por otro lado, no tiene efecto en su ya de entrada elevado poder adquisitivo y si lo tiene es inverso al de los europeos, dado el gran aumento de la demanda de hidrocarburos en países del Golfo Pérsico. La clase media alta china, por otro lado, sigue contando con un gran potencial, mientras que el turista japonés es el más gastador del mundo (3.000 euros por persona de promedio en 2021). Con todo, la guerra sí afectará las conexiones japonesas, dado que las rutas más cortas a Europa sobrevuelan territorio ruso, ahora un espacio cerrado.
SUIZA
Un sector turístico tocado pero con ganas de remontar. Las llegadas suizas rondaban el medio millón en los años previos a la pandemia, unas cifras que, unidas a la capacidad de gasto de este visitante, lo situaba como un mercado a tener muy en cuenta. La crisis sanitaria golpeó duramente a un sector turístico que la sufrió especialmente y un 25 % de las agencias de viaje han desaparecido. La cifra de visitas hasta marzo, no obstante, delata una cierta recuperación, por lo que se espera haber culminado la remontada a final de año o, al menos, quedarse cerca.