Las renuncias a herencias en Baleares se han disparado un 151 por ciento en la última década, según los datos de un informe del Consejo General del Notariado. En concreto, en el año 2011 hubo 750 desistimientos, mientras que en el ejercicio 2021 fueron 1.889. Principalmente se producen por motivos económicos, ya que los herederos no pueden o no quieren hacerse cargo de los gastos que puede acarrearle la misma.
Se trata de un incremento muy importante, ya que la aceptación de herencias no ha crecido en la misma forma. En concreto, en el ejercicio 2011 fueron 7.385, mientras que en 2021 fueron 8.358. Por tanto, se trata de un aumento del 13,17 por ciento. Cabe destacar que las renuncias a herencias prácticamente se han incrementado cada año en la última década, con la excepción de 2019, cuando se produjo un ligero descenso. En concreto, se pasó de las 1.586 de 2018 a las 1.568 de 2019. Si se toma como referencia 2020 respecto a 2019, el año pasado se produjo un incremento del 9,8 por ciento.
La pandemia aumenta las herencias
La pandemia de la COVID-19 también ha provocado un incremento de las herencias en las Islas. En 2021 se aceptaron 8.358 frente a las 6.815 de 2020. Por su parte, en 2021 se produjeron 1.889 renuncias mientras que en 2020 fueron 1.719. De este modo, el total de herencias (aceptadas y rechazadas) en 2021 fue de 10.247, lo que se traduce en un 20 por ciento más que en el año anterior.
A nivel nacional, desde el Consejo General del Notariado han explicado que «a diferencia de lo que ocurrió en el año 2020, durante 2021 el exceso de mortalidad sí se ha traducido en un incremento de los actos notariales relacionados con las herencias, y de hecho, tanto las renuncias como las aceptaciones han aumentado significativamente en 2021». En este punto, han precisado que «los actos relativos a las herencias pueden llevarse a cabo durante mucho tiempo, por lo que constituyen una variable retrasada respecto de la evolución de la mortalidad. Esta circunstancia, junto al mencionado efecto 'espera o rebote', parece explicar que muchas de las operaciones hayan esperado a formalizarse durante el 2021, en lugar de en el 2020, que recordemos, tuvo un exceso de mortalidad mucho mayor».
El apunte
Estos son los principales motivos por los que se renuncia a una herencia
Las renuncias a herencias están al alza. El motivo más común es la existencia de deudas, ya que cuando se acepta una herencia también van incluidas éstas. En algunos casos las deudas superan a lo bienes que se heredan. Otro motivo de no aceptación es la existencia de bienes que no se puedan transformar en dinero, es decir, patrimonio que no se puede vender para pagar deudas e impuestos derivados de la herencia. Un caso muy común es el de las viviendas alquiladas, por las que sí se tiene que abonar el impuesto de sucesiones y la plusvalía, pero no se pueden vender.
En otros casos el impuesto de sucesiones que se tiene que abonar es tan alto que el heredero no puede asumirlo y prefiere renunciar. Esto se da especialmente en las herencias que provienen de parientes lejanos o amigos, ya que los impuestos se pagan en función del parentesco que se tiene con el fallecido.
Estas situaciones se agravan especialmente cuando la herencia no tiene dinero, ya que algunos herederos no disponen de liquidez suficiente para hacer frente al patrimonio. Es preciso tener en cuenta que la tramitación de una herencia conlleva gastos importantes como los honorarios del notario en la escritura de aceptación, la minuta del abogado, los honorarios del registro de la propiedad en el caso de que haya inmuebles que se tienen que inscribir, los honorarios del registro mercantil si se tienen que inscribir sociedades, posibles tasaciones para saber el valor de los bienes, tasas en tráfico para el cambio de nombre de los vehículos, etc.
Otro posible motivo de renuncia es para evitar problemas familiares o para beneficiar a uno que cuente con menos recursos económicos.