El precio del carburante ha empezado a dar una tregua, según ha informado el presidente de la Federación de Estaciones de Servicio de Baleares, Joan Mayans. En este sentido, ha argumentado que el hecho de que Estados Unidos haya levantado las sanciones a la compra de crudo a Venezuela e Irán ha sido clave en la bajada del precio; también ha influido el hecho de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) haya puesto sobre la mesa la posibilidad de incrementar la producción.
En este sentido, Mayans ha informado que las gasolineras están comprando el combustible más barato que la semana pasada, cuando tuvieron que venderlo por debajo del precio de coste para no subirlo de golpe 30 céntimos a los consumidores. El hecho de poder comprar el combustible más barato, aunque «sigue siendo muy elevado», también ha permitido poder venderlo a unos 8 céntimos menos el litro, en el caso de la gasolina 95 y el diésel normal; la gasolina 98 y el diésel mejorado se han abaratado menos.
Luis García Langa, director de Corredordefondos.com, ha explicado que «en el mercado de futuros, el barril de Brent está cayendo casi un 30 por ciento desde sus máximos de la semana pasada, pero aún está por encima de niveles pre-invasión. Está claro que la guerra no ha sido el único motivo de esa escalada, de hecho ya había subido más de un 20 por ciento en lo que llevábamos de 2022 y casi un 90 por ciento desde finales de 2020». A su modo de ver, «poco ha cambiado para ver estas caídas desde máximos: se habla de incrementos de producción de la OPEP, de venta de Venezuela o de Irán, pero realmente la oferta no se ha incrementado, con lo que esta volatilidad podría volver a hacer subir el crudo de no ponerse remedio con incremento de la oferta de forma consistente. Aún sin producirse más subidas, los precios todavía nos estarían llevando a combustible caro y alta inflación, con lo que urgen soluciones como incrementar la inversión público-privada en energías verdes».
Se descartan cierres temporales de gasolineras
El presidente de la Federación de Estaciones de Servicio de Baleares descarta cierres temporales de gasolineras en las Islas como está ocurriendo en algunos puntos de la Península; tampoco se prevén reducciones de personal. Sí ha reconocido que se han reducido las ventas, ya que los ciudadanos optan por utilizar menos sus vehículos, siempre que puedan, para no gastar tanto. Así, desde que empezó la guerra en Ucrania las ventas se han reducido un 10 por ciento; si se compara con marzo de 2019 el descenso llega al 20 por ciento. Mayans ha precisado que la semana pasada se produjeron dos picos de ventas el jueves y el viernes por temor a un desabastecimiento. «Hasta muchas empresas llenaron todos sus vehículos».