El presidente de El Pi, Tolo Gili, ha reclamado este miércoles seguridad jurídica para las 90.000 plazas de alquiler vacacional existentes, tras la aprobación por parte del Govern del decreto ley de turismo. Gili, junto con los vicepresidentes de la formación, Xisca Mora y Jaume Monserrat, y el portavoz del grupo parlamentario, Josep Melià han mantenido una reunión con el presidente de Habtur, Antoni Barceló y la gerente de la patronal, Maria Gibert.
«Desde El Pi proponemos que las plazas se puedan intercambiar entre particulares para no cronificar el sector», ha planteado Gili. Con la normativa aprobada por el Govern, ha subrayado, «todas las plazas» de alquiler turístico anteriores al año 2017 no se pueden intercambiar, vender o cambiar de ubicación y, por tanto, están en riesgo de desaparecer porque en este sector existe mucha movilidad, lo que no ocurre en los establecimientos hoteleros.
Por ello, El Pi reclama cambiar la nueva norma para que las medidas de decrecimiento sean «equitativas» entre el sector hotelero y el sector del alquiler turístico. En relación con las estancias turísticas en viviendas plurifamiliares que tienen autorizaciones temporales por un plazo de 5 años, tanto el Pi como Habtur consideran que deberían pasar a ser indefinidas porque si no se hace esta previsión, no se podrá mantener esta oferta turística.
«Todo esto no afectaría a la congelación de las plazas de las bolsas de plazas turísticas, pero permitiría que los propietarios y empresarios pudieran continuar ejerciendo su actividad turística con una mínima de seguridad y garantías», ha declarado Gili.