Terraferida ha denunciado este miércoles que la oferta turística legal ha alcanzado las 410.573 plazas en 2021, tras la concesión por parte de la Conselleria de Turismo de 2.013 plazas nuevas, un 0,5 % más, cifras que advierte de que «indican que no hay cambio de modelo sino todo lo contrario». La entidad conservacionista ha criticado en un comunicado que la oferta turística de Mallorca no deja de crecer y que el Govern del pacte ha otorgado 93.774 nuevas camas turísticas en 6 años, desde 2015, a razón de 46 plazas al día. Del total de la oferta turística de Mallorca, 307.443 plazas son hoteleras y 103.130 de alquiler turístico y otras tipologías.
Según Terraferida, «los datos muestran cómo en los últimos años se ha producido un incremento masivo de plazas», de manera que, si en 2015, Mallorca contaba con 329.000 plazas, ahora supera ya las 410.500. La entidad advierte de que, aunque «es difícil encontrar un solo día en el que partidos, organizaciones y destacados miembros de la sociedad no hablen cambio de modelo y diversificación económica, por no ser tan dependientes del turismo», las cifras «no reflejan ningún cambio en la orientación de las políticas turísticas», e insiste en que «dentro del período 2015-2021 se habrán creado 46,5 plazas turísticas por día».
La entidad ha hecho un llamamiento a la responsabilidad del Govern y del Consell de Mallorca y les ha pedido que inicien «una nueva etapa de contención del crecimiento turístico». Terraferida propone un gran pacto social para arbitrar medidas de contención y ahorro de recursos naturales como el agua, la energía y el suelo fértil «que permita rebajar la obscena generación de residuos y mejorar la calidad del aire y del agua potable». «Es imprescindible redirigir los esfuerzos hacia sectores olvidados y que podrían ser más estables y generadores de soberanía, sobre todo frente a un futuro climático difícil. Hay que dar una oportunidad a la industria local y la agricultura ecológica, a cerrar el ciclo del agua y reorientar construcción, carpintería, fontanería y despliegue de energías limpias hacia la rehabilitación de barrios y pueblos, donde hay décadas de trabajo», reivindica.
Terraferida reclama que se establezca una moratoria de plazas turísticas, que se revisar la ley turística de Baleares con criterios de sostenibilidad; e introducir un sistema 2x1, en el que por 2 plazas turísticas se den de baja por cada una nueva. No renovar licencias turísticas en viviendas plurifamiliares. y clausurar los «decenas de miles de plazas turísticas ilegales», son otras reivindicaciones de la organización.