El Instituto Balear de la Energía (IBE) ha propuesto la adjudicación de dos instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo sobre centros de salud con una potencia total de 90 kW. Según ha informado en una nota de prensa la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, se trata del Centro de Salud de Son Rutlan (Palma), donde se ubicarán 50 kW sobre su cubierta, y el de Santa Ponça (Calvià), que tendrá 40 kW nominales en su techo. La ejecución de los dos proyectos salió a licitación con un presupuesto de 61.214,66 euros y 70.550,06 euros, respectivamente.
La propuesta de adjudicación se ha hecho a las empresas Eiffage, en el caso de Son Rutlan, por un importe de 52.564,73 euros más IVA; y Masred, en el caso de Santa Ponça, por un importe de 43.169,54 euros más IVA. En sendos casos, según han apuntado, las instalaciones permanecerán como titulares del IBE, que facturará la electricidad a precio de coste al IBSalut, cosa que permitirá financiar el mantenimiento de las instalaciones, así como proyectos futuros.
El director gerente del IBE, Ferran Rosa, ha resaltado la voluntad del IBE de ser una herramienta fundamental para aumentar las energías renovables. Por eso, no sólo se impulsan autoconsumos compartidos, sino que se dan facilidades para que espacios como los centros de salud dispongan de placas solares que abaraten su factura y contribuyan a la mitigación y la lucha contra el cambio climático. Según ha recordado el departamento que dirige Juan Pedro Yllanes, la ejecución de estos tipos de proyectos es especialmente relevante para el Govern no sólo por su vertiente ambiental sino también por el abaratamiento de la factura.