El Govern está ultimando su dispositivo de seguridad ciudadana de este Fin de Año para velar por el cumplimiento de la normativa anticovid en el ámbito del ocio nocturno. El director general de Emergencias e Interior, Jaume Barceló, se ha reunido este miércoles con el comandante de la Guardia Civil, Enrique Gómez, el director del Instituto de Seguridad Pública de las Islas Baleares (ISPIB), Vicenç Martorell, y el jefe del Departamento de Emergencias, Toni Bernat. El objetivo era definir el dispositivo especial del Govern para asegurar el cumplimiento de las medidas de la covid-19 en el ocio nocturno el 31 de diciembre y el 1 de enero del 2022.
El dispositivo, coordinado por la dirección general de Emergencias e Interior, dispondrá de inspectores del Govern y los nuevos inspectores de Turismo del Consell de Mallorca, y también colaborarán policías locales y la Guardia Civil. Los inspectores del Govern y el Consell actuarán en la Part Forana de Mallorca junto con las policías locales y la Guardia Civil para evitar que determinadas celebraciones supongan un exceso de aforo y el incumplimiento de la normativa vigente. La Policía Local de Palma se encargará de su ámbito de actuación y también se prevén inspecciones en Ibiza y Menorca. El objetivo de este dispositivo es que las celebraciones, tanto de Nochevieja como del día 1 de enero, se desarrollen con las máximas condiciones de seguridad, que se exija el pasaporte covid como corresponde y sin aglomeraciones, que los bailes se celebren con mascarilla y que se eviten prácticas incívicas, botellones o aforos excesivos.
Desde el Govern se recuerda que este dispositivo tiene por objetivo garantizar la seguridad de todas las personas en un momento de alto número de contagios y evitar que los incumplimientos de unos pocos pongan en riesgo la seguridad de todo el mundo. Las multas por infracción de la normativa van de un mínimo de 100 euros por una infracción leve a un máximo de 600.000 euros por una infracción muy grave. El Govern quiere reiterar su agradecimiento a la gran mayoría de la ciudadanía que, pese al cansancio acumulado, conoce las normas de protección y las continúa aplicando sin excepción.