La esperanza de vida de los ciudadanos de Baleares cayó unos meses en el año de la pandemia. Es la primera vez en décadas que se produce esta caída en este indicador. Los residentes en las Islas tenían una esperanza de vida de 83,71 años en 2019 y, tras el primer año de la pandemia, cayó ligeramente hasta los 83,46 años. Es de una de las comunidades donde menos cayó si se compara, por ejemplo, con Castilla-La Mancha. Los ciudadanos de este territorio han perdido, de repente, dos años de esperanza de vida al pasar de una media de 83,57 a 81,22 en apenas un año. El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó ayer los indicadores demográficos básicos, en los que se aprecia un repunte en la tasa de mortalidad.
La de natalidad, por el contrario, sigue en caída libre. La tasa es del 7,78 cuando hace cinco años era del 9,02. Eso significa que, en este lustro, la natalidad se ha desplomado más de un 20 %. Pese a ello, Balears es de las comunidades con mayor tasa de natalidad. Este dato tiene que ver con el hecho de que en las Islas viven muchas mujeres inmigrantes, que tienen más hijos de media que las españolas. Eso explica que sea Murcia la comunidad española con mayor tasa de natalidad porque también allí hay mucha inmigración. La tasa es del 9,08 cuando la media española está en el 7,19.
El Instituto Nacional de Estadística también facilitó los datos sobre nupcialidad, con una información relevante: más de la mitad de los niños que nacieron en Balears en 2020 eran de madre soltera. La cifra también ha aumentado en estos años ya que el porcentaje era del 48,49 hace cinco años. Solo Canarias supera a las Islas en este porcentaje. La tasa de nupcialidad en Balears fue el año pasado del 2,44, una de las más altas de España, que cerró 2020 con una tasa media de 1,91.