Investigadores del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, Imedea, llevarán a cabo la secuenciación completa del genoma de la posidonia oceánica, para conseguir una mayor protección y conservación de esta especie emblemática al conocerla mejor. La secuenciación completa del genoma de la posidonia ayudará a conocer en profundidad esta especie y a mejorar la gestión y la conservación de sus poblaciones en el Mediterráneo, ha informado en un comunicado el Imedea, que cuenta con financiación del Grupo Iberostar y con la colaboración de la Fundación General CSIC para la realización de este proyecto. «PosiGenome» persigue sentar las bases de la genómica de la posidonia oceanica y facilitar futuros estudios genéticos, de forma similar a los avances genéticos obtenidos por el proyecto genoma humano.
En concreto, se construirá un genoma de referencia de alta calidad y precisión que permita identificar, anotar y estudiar los genes y otros elementos funcionales involucrados en diferentes mecanismos básicos de la biología de la planta, de forma que se entiendan mejor sus procesos de germinación, floración, fotosíntesis, división celular, elongación de la pared celular, ramificación y adaptación al medio marino. Además, la investigación permitirá analizar y comparar en su totalidad la variabilidad genética de las diferentes praderas del Mediterráneo y aportar nuevos conocimientos sobre su historia evolutiva.
El estudio es «vital para identificar si existen poblaciones de Posidonia oceanica más resistentes que otras», cuáles son las más vulnerables y para entender cómo reaccionan las diferentes variantes ante determinadas condiciones medioambientales, ha explicado el Imedea.
El conocimiento derivado de la investigación posibilitará implementar planes de conservación específicos para cada zona, así como la regeneración de las praderas mediante la selección genética de semillas con características más específicas para cada región mediterránea. El Imedea recuerda que la posidonia oceanica desempeña un papel fundamental como generadora de hábitats en el Mediterráneo y en la producción de oxígeno, es fijadora neta de carbono, influye en la dinámica sedimentaria y proporciona refugio a numerosos organismos vitales para la preservación de la salud marina.
Por eso, determinar su genoma tiene implicaciones en el campo de la biología comparativa, la genética y la conservación de la biodiversidad. Imedea explica que los resultados de la investigación serán como el «libro de instrucciones» moleculares que definirá la forma del organismo para que funcione y se reproduzca. Su decodificación «abre literalmente todo un mundo de posibilidades para entender su biología y analizar los factores que determinan su supervivencia».
Hasta el momento, los estudios genéticos sobre la posidonia han sido muy limitados, debido a la ausencia de un genoma de referencia como el que se pretende analizar.
El Imedea señala la urgencia de este estudio debido al inminente cambio climático y otros impactos que provienen de actividades relacionadas con la acción humana. El objetivo de «PosiGenome» es ensamblar la secuencia continua de cada uno de los 20 cromosomas que posee la Posidonia oceanica. El equipo investigador recogerá muestras de posidonia en las costas baleares y las investigará hasta 2024. El proceso irá acompañado de la celebración de talleres experimentales para escuelas sobre esta especie.
El proyecto lo lidera el doctor Joan Pons (Imedea-CSIC-UIB), y participan Jorge Terrados, del mismo instituto, Laura Botigué, del Centro de Investigación en Agrigenómica (CRAG) de Barcelona y Hugo de Boer, de la Universidad de Oslo (UiO). El conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, ha felicitado a los impulsores de un proyecto que ha calificado como «muy interesante porque puede facilitar la adopción de medidas concretas de protección según la zona en que se encuentra la pradera, con el resultado de un mejor estado general de la especie”, ha informado el departamento autonómico en otro comunicado.