La presidenta de Baleares, Francina Armengol, ha pedido no crear «alarmismo» ante un hecho «inédito» como el vivido el pasado viernes en el aeropuerto de Palma cuando aterrizó un avión por una supuesta emergencia médica y escaparon a la carrera por las pistas una veintena de migrantes marroquíes.
Con ocasión de un acto público, Armengol ha reconocido este lunes que le «preocupa» este suceso, al igual que a la ciudadanía, por lo que se deberán de revisar los protocolos de seguridad de los aeropuertos.
Algo así puede ocurrir «aquí y en cualquier otro lugar», ha dicho Armengol, que ha mostrado su apoyo al Gobierno y a las fuerzas de seguridad del Estado.
Se trata, ha dicho, de algo que no ha ocurrido antes en ningún aeropuerto de España, por lo que se deberá analizar este caso y concretar medidas de seguridad.
En ningún caso, ha dicho convencida, afectará a la imagen de las Islas Baleares, un destino «absolutamente seguro» para los millones de turistas que viajan cada año al archipiélago.
Los turistas «no tienen ningún miedo» a viajar a Baleares, «ni mucho menos», ha subrayad