Este martes falleció en Palma, a la edad de 84 años, Sebastià Camps Perelló, propietario del Forn de La Glòria, uno de los comercios más emblemáticos de la ciudad. La panadería, del que ya se tenía conocimiento de su existencia en 1717, figura en el Catálogo de Establecimientos Emblemáticos confeccionado por el Ajuntament.
En 1973 adquirió el horno a su propietario, aunque él ya llevaba años trabajando en el obrador de una panadería que siempre se ha mantenido fiel a la tradición panadera y repostera de Mallorca. En la actualidad eran sus dos hijos, Sebastià y Xisca, los encargados de regentar el negocio más que centenario.
Durante su larga trayectoria empresarial, Sebastià Camps siempre puso especial énfasis en mantener el espíritu que hizo que el Forn de la Glòria fuese uno de los locales de referencia para quienes eran amantes de los sabores ancestrales de las elaboraciones propias de la Isla, un amor que pervive en sus hijos. Esa fidelidad a sus orígenes se mantuvo incluso en los momentos de crisis, en los que el horno, como el resto del sector panadero, tuvo que hacer frente a la irrupción de los nuevos modos de comercialización. Con él el Forn de la Glòria, en el número 7 de la calle del mismo nombre, fue un auténtico templo de la artesanía panadera y repostera de Palma. El viernes se oficiará el funeral en la parroquia de Santa Creu.