El debate de política general que la presidenta Armengol abre este martes en el Parlament durará formalmente dos días pero se mantendrá vivo durante meses. No es más que el arranque de un largo periodo que se prolongará hasta las próximas elecciones de 2023. Armengol defenderá la gestión del Govern –aunque Podemos y Més, sus socios, aprovecharán para marcar perfil propio– y el PP empezará a visualizar su alternativa. Es el quinto debate que afronta Armengol y el que hace 35 desde 1983, que fue cuando se celebró el primero.
La candidata del PP para 2023 es Marga Prohens, no es diputada autonómica y no intervendrá en el debate. Será el portavoz parlamentario, Antoni Costa quien –mañana miércoles– le dé la réplica. Ayer fue la portavoz adjunta, Núria Riera, la que caldeó el ambiente. Dijo que veía a la presidenta «muy nerviosa» y que esperaba que «cambie de actitud y abra nuevos espacios de diálogo reales y de consensos de verdad». La diputada, en línea con lo que dijo Prohens tras verse con la presidenta en el Consolat, ofreció pactos y «consensos de verdad». Según Riera, «el crédito de la presidenta está en entredicho».
La diputada ‘popular' recordó que el debate de política general es un momento para que Armengol «dé cuenta de su responsabilidad delante de toda la gente de Balears», al considerar que la presidenta «tiene su credibilidad en entredicho».
La portavoz adjunta del PP exigió de la líder del Ejecutivo autonómico «explicaciones claras» y que tenga «más de humildad».
Economía y ‘escudo social'
El equipo de la presidenta del Govern continuaba ayer dándole los últimos toques al discurso. Sus líneas generales están pactadas con los socios y se dividirá en dos bloques: de un lado, la defensa de la gestión del Ejecutivo en la pandemia. Habrá alusiones a que se han salvado vidas y también a que se ha salvado, o se está reactivando, la economía. Todo ello, según la información que se va filtrando, con un «fuerte escudo social» y con la colaboración del sector económico, tanto organizaciones empresariales como sindicatos. Las inversiones estatales u los fondos de la UE centrarán buena parte de la intervención .
La presidenta Armengol destacará la importancia de «ir de la mano» para avanzar y hará un llamamiento «en clave de país».
Patricia Guasp (Cs) pidió expresamente a Armengol que no aprovechará este asunto «en clave electoral». Dijo: «Le pedimos un compromiso firme en no utilizar los fondos europeos para cuadrar las cuentas y que lleguemos a un acuerdo en el pacto de reactivación para proponer los mejores proyectos estratégicos de nuestras islas». El PP decidió mantenerse al margen del pacto y reclamó otro formato.
Desde Més per Mallorca (que quiere que se hable «de las cuestiones que afectan a la ciudadanía») Josep Ferrà reclamó de los ‘populares' que aclaren cuál es su alternativa para gobernar, si es con Vox, con Cs o con el PI. Este grupo también estrenará este martes portavoz: Josep Melià.
Este partido, que insistirá en un compromiso claro sobre el REB (algo en lo que están de acuerdo todos los partidos) también reclamará la «modernización del turismo». Desde Podemos se incidirá en las áreas que gestionan y en cómo puede avanzrase hacia la creación de una empresa pública de energía.